Trinidad, una vez más se levanta y gana

Un día como hoy en el año 2000, el ex-campeón mundial welter, el puertorriqueño Félix “Tito” Trinidad (36-0, 30 KO’s) iba en busca de la corona superwelter AMB en poder del invicto estadounidense David Reid (14-0, 7 KO’s).

“Tito” venía de vencer a Oscar De La Hoya en unificación del título welter, mientras Reid estaría defendiendo su título por tercera ocasión. Además era reconocido como el único estadounidense que obtuvo medalla de oro en los juegos olímpicos de 1996.

El combate comenzó con un Reid punteando con el jab y lanzando su derecha volada. Trinidad buscando la forma de romper la defensa de Reid. En el tercer asalto una derecha de Reid lleva a Trinidad a la lona, este se levanta sin mayores consecuencias. Era evidente la cara de preocupación entre las amistades y este servidor. Verdaderamente la defensa de Reid se observaba solida.

En el cuarto, quinto y sexto asalto se observaba a un Reid con mucha confianza, su jab relámpagueante y su derecha estaban haciendo un buen trabajo. Trinidad al percatarse que se la hacia difícil penetrar la guardia, conectaba fuerte abajo y en los brazos del campeón. Observaba a “Tito” más activo pero Reid estaba manejando bien la distancia. Y la preocupación continuaba latente.

En el séptimo asalto Reid se mueve menos pero continua con efectiva ofensiva, pero Trinidad lanza una combinación de tres golpes y de repente “boom”, el gancho de izquierda llega a la barbilla del campeón. Reid cae a la lona completamente sentido, se incorpora y resiste el embate. Todo era algarabía, llegó el golpe esperado y entonces era cuestión de tiempo.

Octavo, noveno y décimo asalto era todo “Tito”, en ocasiones Reid estaba al borde del derrumbe pero valientemente resistía. En el undécimo asalto fue de paliza, Trinidad derribó en tres ocasiones a Reid, este último en una de las caídas mientras escuchaba el conteo colocó su guante detrás de la cabeza, como si se estuviera preguntando … ¿me quedo o me levanto? Decidió levantarse.

En el duodécimo asalto, se observa a Trinidad en busca del nocaut pero Reid los resistió todo. Finalizado el combate no había duda quién era el vencedor. Trinidad conquista el título mundial en una segunda división. Una vez más el puertorriqueño después de visitar la lona se levantó para destruir a su rival.

A continuación el combate