Carne para Golovkin

Cuanto mayor tamaño posee una fiera, más difícil es alimentarla. Y cuando la carne escasea, este problema se agrava. Ahora mismo en el panorama boxístico, el mayor depredador, la bestia más tremebunda, es sin duda el campeón WBA/IBO del peso medio, Gennady Golovkin(29v(26 ko)-0d-0e). Este kazajo de 31 años, suma ya diez defensas consecutivas antes del límite y nadie pone en duda que es probablemente, la mayor herramienta de destrucción del momento. Golovkin es una máquina, que, sin embargo, está limitada a contender contra objetivos menores, mientras se mantiene a la espera, de que por fin un rival de gran magnitud se exponga a su poder.

Golovkin, un campeón tremebundo.
Se puede resumir la situación actual de Golovkin viendo la pelea que disputó el pasado sábado contra Osumanu Adama(22v(16 ko) 4d 0e), un boxeador voluntarioso, que aguanta lo que puede, pero que al final es pasto del poder de demolición del campeón.Porque el kazajo no es solo un noqueador de esos que con un golpe cierran la pelea, es un metrónomo, que castiga, castiga y castiga. Una veces destruye abajo, otras desvencija la zona superior, pero siempre acaba superando la oposición de sus contrincantes. Adama aguantó siete asaltos, pero bien pudo verse en el vestuario antes. Es un cuento que lleva reiterándose durante demasiado tiempo, negativo para él, y negativo para sus seguidores.
¿Alguno, más allá de los fanáticos acérrimos, estaba motivado por verlo frente a un púgil como Adama? Lo dudo. Pero esto mismo lo podemos aplicar A Makoto Fuchigami, Proksa, Ishida, Macklin… Retahíla de nombres, que protagonizan una racha de defensas, que si bien es meritoria, parece menos impresionante que sobre el papel. Evidentemente, hay un factor que no podemos obviar, el nivel de Golovkin medra, y mucho. No todo el mundo está dispuesto a subir con él en un ensogado, sobretodo porque su impacto mediático, por el momento, no conlleva unas bolsas en consonancia a su categoría como púgil. Si a esto, sumamos que en su peso, los pocos nombres que hay, no se lo plantean como rival. a día de hoy Golovkin es una fiera sin presas con las que pueda satisfacer su apetito.
El objetivo, desde hace mucho tiempo, de Golovkin, no es otro que Sergio “Maravilla” Martínez(51v(38 ko)-2d-2e), campeón WBC del medio, sin embargo, como todos ya sabéis, esta pelea está lejos, muy lejos de firmarse a corto plazo por múltiples razones. La primera, que el acuerdo entre Maravilla y el boricua Miguel Cotto para medirse el 7 de junio, está muy cerca de firmarse. No podemos olvidar que el argentino retornará tras mucho tiempo de inactividad y con muchas lesiones en los últimos tiempos, por lo tanto, pensar que esta puede ser, en caso de salir mal, la última pelea de su carrera, no me parece nada descabellado. Pero poniéndonos en el escenario de que salga bien,  que Maravilla vuelva en plenitud y gane o dé un gran combate contra Cotto, ¿alguien duda de que se volverán a enfrentar por una bolsa mayor?, teniendo en cuenta la categoría de ambos, no es una posibilidad para nada descabellada. Con esto quiero ir a parar que haría falta una bolsa descomunal, para que Sergio, en evidente declive, exponga su salud contra un boxeador terrible como el kazajo. Hace 3-4 años, Maravilla sin duda podría no solo haber plantado cara a Golovkin, sino hacerlo con opciones de victoria, pero ahora creo que es demasiado inteligente como para exponerse de esa manera.
Descartado el argentino, las otras dos opciones, de menor nivel, también campeones del medio, Félix Sturm y Peter Quillin, no parecen por la labor, de momento, de vérselas con Gennady. Ante esta perspectiva, el kazajo, en caso de ambicionar convertirse en algo más que un campeón intrascendental de este deporte, debería buscar cambiar de división. En el superwélter hay muchos nombres, desde Saul Álvarez al propio Cotto, pasando por el mejor del mundo, Floyd Mayweather. Lo que ocurre es que, incluso asumiendo que Golovkin no tuviera problemas en dar el peso, penitencia terrible para muchos peleadores, se enfrentaría a boxeadores con una velocidad que podría minimizar, y mucho, su poder de destrucción. Hacia arriba, dos principalmente, el británico Carl Froch y Andre Ward. El primero siempre está dispuesto a asumir cualquier reto, aunque contra Groves dio señales evidentes de declive, mientras que Ward(27v(14ko)-0d-0e), se encuentra ante un panorama tan o más desolador que el del kazajo, afrontando una sequía de rivales alarmante, pero que no parece por la labor de ceder en el pesaje.
Llegados a este punto, este gran campeón tiene dos opciones: mantenerse en su inercia actual, esperando a que le llegue ese gran combate que espera, corriendo el riesgo de que aparezca ya tarde, o moverse para buscar ser, más que un buen campeón que destruye rivales mundanos, un hombre que puede ser recordado en este deporte. Salir a cazar, o esperar, esa es la cuestión.

 

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