“LE PUSO UN CORAZÓN DE FANTASÍA Y PACQUIAO SONRIENDO DESPERTÓ”

Por Andrés Pascual

Si fuera verdad la informacion de que Manny Pacquiao boxeó contra Lucas Mathysse con una lesión congénita cardíaca, sería “ponerle la tapa al pomo” en cuanto al desmadre que han formado los “padrecitos” del boxeo de hoy:

http://espndeportes.espn.com/boxeo/nota/_/id/4561281/medicos-pidieron-a-pacquiao-no-pelear-ante-matthysse

¿Una lesión congénita; es decir, de nacimiento, que nunca le fue diagnosticada? Señor, eso se llama pre-lesión cardíaca con posibilidades de evolucionar a “inhibición” y muchas y reales de morir hasta levantando a un hijo de 1 año del suelo…

¿Para quiénes creen que escriben estos plumíferos de ESPN y los otros, que repiten de buena gana y sin pena lo que les cantó Aquiles Zonio (Arum y la televisión HBO tras bambalinas), representante del peleador, sobre “el notición”?

La información acerca del padecimiento de Pacquiao es, evidentemente, una salida del closet sobre verdades que siempre se han sospechado, pero nunca las han aceptado tan brutal y gratuitamente como ahora, con lo de la lesión “pequeña” en el corazón.

Resulta que tuvo problemas al respirar, fue a un hospital y le hicieron un angiograma, pero “mejoraba con el esfuerzo físico en entrenamiento” ¿Qué creen estos individuos?

Los médicos le pidieron que no boxeara; la preocupación fue presa del campo de preparación y su trainer, Buboy Fernádez, lloró sin consuelo.

Bueno, vamos a revisar cosas: alguna vez Freddie Roach dijo que el filipino subía corriendo una montaña de buena altura cada vez que concluía la sesión diaria de entrenamiento; jamás se aludió a ningún efecto que alterara el ritmo respiratorio (evidente señal del padecimiento), por el tremendísimo esfuerzo.

Con facilidad meridiana subía de peso y ganaba velocidad y pegada, no hubo quejas por ninguna condicion que identificara a un Pacquiao enfermo.

Bajo ninguna circunstancia, una enfermedad cardíada es pequeña ni puede mejorar por la sumisión a grandes pruebas físicas como entrenar y boxear.

¿Por qué han informado semejante falta de respeto? ¿Nadie puede cuestionar y destruir la falacia con cuatro palabras? Bueno, que no sean ni ESPN ni las sucursales pagadas por el pulpo boxístico.

¿Conocieron las instancias regentes del boxeo la situación del asiático, incluido el chequeo médico bajo condición de enfermo?

¿Quién es un peleador, para continuar entrenando hasta pelear el día señalado, si padece una lesión crónica cardíaca? ¿Por qué este hombre lleva más 20 años en el ring?

¿Cómo fue posible que los médicos “le pidieran que no boxeara”, en vez de someter a suspensión la licencia del boxeador?

¿La televión de PPV y Bob Arum estuvieron en función de criminales por intereses y manejos más oscuros que cuando la época de los gánsters italianos en el boxeo? Eso se descuenta, pero, en mi caso, no creo nada, porque no se habla claro

El tiro les debió salir por la culata, pero, como en todo con respecto al boxeo de hoy, el fusil no estaba cargado…

El título del material, dos vertsos del chachachá PINOCHO del maestro José A. Fajardo; al personajillo de madera del cuento de Carlo Colludi hubo que ponerle un corazón de fantasía para humanizarlo; pero la nariz le crecía cada vez que soltaba una mentira…

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