La última pelea del gran Carlos Monzón

Hace 40 años en el Principado de Mónaco

(Foto Archivo: ElHERALDO.CO)

Monzón vs. Valdez

Luego de batallar durante casi siete años, con los mejores retadores que se le presentaron, y  de retener en 13 ocasiones la corona, el argentino  Carlos Monzón, llegó a su última pelea, que era también una revancha, ante el furioso colombiano Rodrigo Valdez. La pelea, tal como la anterior, el 26 de junio de 1976, se celebró en el estadio Louis II de Montecarlo, capital del Principado de Mónaco. En ambos casos, Monzón ganó por decisión unánime de los jueces. La determinación del Campeón argentino de dejar el boxeo, se veía venir. En parte por su poca actividad en los últimos tiempos, lo que denotaba su cansancio y también por la presión de su novia, la vedette argentina Susana Giménez quien deseaba apartarlo de la profesión que le dio fama y fortuna.

Curiosamente, después que Monzón dejó el boxeo, su relación con Susana se fue acabando hasta finalizar definitivamente. Monzón era un ídolo en Francia y algunos países de Europa, mucho más que en Argentina. Sus peleas titulares en Italia, Francia, Mónaco, Reino Unido, más su amistad con el actor francés Alain Delon quien lo adoptó tanto para el cine como para el boxeo, le valió gran parte de su popularidad. Monzón fue campeón de los Medianos entre el 7 de noviembre de 1970 y el 30 de julio de 1977 cuando se enfrentó a Rocky Valdez en Montecarlo. Se retiró siendo un imbatido Campeón luego de 14 defensas de la corona que arrebato por Ko en 12 rounds al ídolo italiano, Nino Benvennuti en el Palacio de los Deportes de Roma.

Llegó al título luego de una larga trayectoria 

Monzón debutó en el boxeo, el 6 de febrero de 1963 en su natal Santa Fe noqueando a Ramón Montenegro. Desde entonces se mantuvo imbatido en siete peleas más, hasta que se presentó por  primera vez en el histórico Luna Park de Buenos Aires y perdió una decisión ante el duro contendiente argentino Antonio Aguilar quien lo venció por decisión. Eso fue el 28 de agosto del 63. Ganó cuatro peleas más, pero el 28 de junio del 64, perdió por decisión en Rio de Janeiro ante el carioca, Felipe Cambeiro. Cinco victorias más y se encontró con su tercera y última derrota en su carrera el 9 de octubre del 64 en Córdoba, ante Alberto Massi.

De ahí en adelante, no perdió más. Si empató varias veces, pero se desquitó en varias oportunidades de sus verdugos, Aguilar y Massi. Pero su estilo gustaba poco. Era muy conservador. Jugaba al cansancio de sus rivales y a la demolición gradual. A veces esperaba demasiado para definir y acabar con sus rivales. Cuentan, que el 7 de noviembre del 70 en el Palacio de los Deportes de Roma, en su pelea con Benvennuti, llegó a la esquina después del campanazo número 11. El entrenador Amilcar Brussa le conminó a terminar con las siguientes palabras: “Ese hombre está listo. Vaya y póngalo Nocaut”. Monzón, que había desgastado a Nino con su Jab, golpes al cuerpo y combinaciones a la cara, salió decidido y con un fenomenal derechazo a la mandíbula hizo caer a Benvennuti en su propia esquina. Allí concluyó todo. Monzón era el nuevo Campeón Mundial Mediano.

Comenzando su reinado, Monzón concedió la revancha al ex Campeón, Benvennuti, quien se negaba a aceptar que fue destronado por un rival que, para ese momento, era muy superior a él. La pelea se dio el 8 de mayo del 71 en el estadio Luis II del Principado de Mónaco. Esta vez, Monzón no desperdició tiempo y se fue al ataque de una buena vez, arrollando desde el principio de la pelea al ídolo italiano. Una izquierda asesina derribó a Nino en el centro del ring y aunque trataba de seguir, el árbitro argentino Víctor Avendaño, detuvo el desigual combate.

Monzón contaba con muchos retadores, y no todos estaban convencidos de su reinado y le atribuían estos triunfos, a una probable decadencia de Nino a quien se acusaba de prestar más atención al cine, a las fiestas y a las muchachas que al Boxeo. Es así como Monzón enfrentó seguidamente, al Ex Campeón norteamericano Emile Griffith, de quien Benvennuti había obtenido el título por allá por el año 68. Monzón noqueó  técnicamente a Griffith en el round 13 ante una furiosa afición argentina que colmó el Luna Park de Buenos Aires.

En el año 72, Monzón defendió su título cuatro veces, tres de ellas en Europa y una, en noviembre, en el Luna Park de Buenos Aires. Allí comenzó la gran campaña del púgil argentino en rines europeos. En esos tiempos, reforzó su amistad con el actor francés Alain Delon, quien le apoyó en su campaña en Europa y le asesoró en cuanto a su imagen. El 4 de abril de ese año 72, despachó al ex Campeón Mediano Jr, Dennis Moyer en el 5to round. Tres meses después, noqueó en el round 12 al retador  francés Jean Claude Bouttier, en París.

En la siguiente defensa, el 19 de agosto en Copenhagen, noqueó al danés, Tom Boggs. Cerró el año en otra pelea dura con el peligroso “Pelón” Bennie Briscoe al que venció por decisión en el Luna Park, luego de pasar algunos sustos. Con cinco defensas, al final del año 72, Monzón comenzaba a lucir como un Campeón sólido. En el 73,  efectuó una pelea a 10 asaltos en Italia y concedió revanchas a dos retadores enjundiosos como el francés Jean Claude Bouttier y al norteamericano Emile Griffith. A ambos los venció por decisión. A uno en Francia y al otro en Mónaco.

En el 74 enfrentó a una verdadera estrella del ensogado, pero pasado de peso y también de años; el cubano residenciado en México,  José Angel Nápoles “Mantequilla”. La pelea se hizo bajo la carpa de un circo en las afueras de París y el organizador fue su gran amigo, el galán francés, Alain Delón. Monzón superó ampliamente a Nápoles y lo obligó a abandonar antes del 7mo asalto. Su siguiente defensa fue en el Luna Park en octubre del 74 en la que noqueó al australiano Tony Mundine, al que se consideraba un hombre peligroso. El 30 de junio se presentó por única vez en el Madison Square Garden de Nueva York noqueando al “Chino” de New Orleans, Tony Licata. En octubre, en Paris, noqueó a Grattien Tonna.

Ya para entonces, Monzón andaa de amores con la vedette argentina Susana Giménez y también le dedicaba tiempo al cine y a eventos sociales relacionados. Ya peleaba menos y no era tan asiduo del gimnasio. Fue desconocido por el CMB, por retrasar compromisos y la entidad con sede en México, sacó un Campeón de la eliminatoria entre Bennie Briscoe y el colombiano Rodrigo Valdez. El moreno de Cartagena salió triunfante y se pactó la pelea unificatoria para el 26 de junio del 76 en el estadio Luis II del Principado de Mónaco.

Gran pelea que Monzón aseguró en el round 14 derribando a Valdez con un derechazo que lo hizo sacar, de boca, medio cuerpo fuera del ring. Poco más de un año después, se pactó la revancha en el mismo sitio. Era el 30 de julio del 77, hace ya 40 años. Monzón se las vio negras al comienzo de la pelea y por primera vez, lo vimos en la lona luego de un violento derechazo del colombiano. El campeón argentino, hizo los ajustes necesarios y en el 9no round, casi le devuelve el favor a Valdez. Lo zarandeó por todo el ring. Los rounds finales fueron de dominio de Monzón pese a la valentía de Valdez que siempre buscó el combate.

Luego de esta pelea, Monzón dejó el boxeo. Lamentablemente su conducta empeoró y comenzó a ser noticia también en las páginas rojas. Lo peor llegó cuando el 14 de febrero de 1988, llegó a casa en estado de ebriedad y agredió a su esposa Alicia Muñiz con quien se había casado y tenía un hijo. Ciego de ira y por los efectos de la embriaguez, arrojó a Alicia por el balcón. Fue enjuiciado y sentenciado a 11 años de prisión por Homicidio simple. Pagó cárcel en el  Penal de Las Flores de Santa Fe, adonde fue visitado por personajes como el actor Alain Delon, Micky Rourke y su antiguo rival Nino Benvennuti.

En los finales de su condena, comenzó a disfrutar de salidas restringidas y en una de esas, el 8 de enero de 1995, sufrió un accidente de autos y murió. Lamentablemente, Carlos Monzón no pudo disfrutar  de su dinero, su fama, gloria y el cariño de los aficionados al boxeo que lo amaban. Pese a todo, es uno de los grandes pesos Medianos de la Historia del boxeo y en Argentina, disfruta de un sitial entre los grandes como Fangio, Di Stefano, Maradona, De Vicenzio, Ginobilli, Messi, Pascualito Pérez. Un recuerdo para el gran Carlos Monzón a 40 años de su última pelea.

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