UGÁS DERROTA A DULORME POR DECISIÓN UNÁNIME

Por Andrés Pascual

A lo mejor estoy tan viejo que veo al revés la realidad: creí que Yordenis Ugás había ganado limpio, sin polvo ni paja y se aparecen “los eruditos” diciendo: “si no le hubieran quitado dos puntos por pegar bajo a Thomas Dulorme (uno en el 10mo a 30 segundos), el perdedor del 2do preliminar Mayweather jr-McGreggor hubiera ganado el pleito”. Bah, “si no es Juana es la hermana”.

La realidad fue que Dulorme pegó bajo varias veces por delante y a los lados, zona que han olvidado los referís que también cuenta, por la articulación ósea que, conectada con fuerza, puede derrumbar a un boxeador y lastimarlo con consecuencias.

Dulorme (24-3, 16 KO’s), perdió porque el cubano boxea mejor y porque Salas “sabe lo que hace”, por cierto, ¿Cuándo van a darle un Trainer del Año, basado en la labor de doce meses tras sus pupilos? ¿Hasta cuándo va a dominar la escena boxística el premio al entrenador de una sola pelea?

La de anoche fue apretada, movida, de acción, de muchos golpes sin corredera, del tipo que le gusta y complace al público, razón por la que puede seguirte a partir de combates como este o “echarte a los leones por peleas deslucidas y monótonas”.

Yo vi ganar al antillano (20-3, 9 KO’s), que tiró dos veces a Dulorme en el segundo, una por upper y otra por gancho, pero la víctima de Crawford logró sobrevivir con ayuda de la campana; más adelante, Dulorme volvió a sentir el efecto de un bombazo de Ugás, pero no cayó…el boricua también derribó al ganador con un gancho al rostro sin mayores consecuencias en el 7mo.

El perdedor logró entrar a la guardia de Ugás con malas intenciones, pero no puede decirse que se salió con la suya, porque el santiaguero, que boxeó a la riposta todo el pleito, lo contragolpeó con derechas cortas, uppers y ganchos, receta fija contra el mal comportamiento.

La pelea fue en la división welter en la T-MOBILE Arena de Las Vegas y las tarjetas 94-91 y 2 93-92 por el oriental, yo la vi 96-92 por mi paisano.

Hay que correr riesgos, comprobado que los cubanos no pueden seguir esperando limosnas de solemnidad de los mandamases, pues deben estar estar dispuestos, como la esquina de Ugás, para tomar el pleito en el que falle cualquiera hasta contra Robinson si bajara del cielo.

Victorias como esta, lograda como sustituto contra hombres difíciles, obligarán a los dueños del negocio a citarlo por la faja mundial en cualquier momento. Si no al tiempo…