En una declaración exclusiva para boxeomundial, el veterano manejador Robert Díaz explotó contra la decisión que dejó a Lamont Roach Jr. sin una victoria clara en San Antonio — una noche que, según él, estuvo amañada desde el principio.Díaz fue tajante y sin filtros:
“¿Qué se supone que hagas cuando tienes que pelear contra tu rival y al mismo tiempo contra los jueces? Estábamos en la casa del Pitbull, en el mismo lugar donde ya nos habían regalado un empate en la pelea del título. Es casi imposible que TODA la prensa y TODOS los aficionados vieran ganar a Lamont… incluso los aficionados mexicanos.”
Aun así, Roach se mantuvo firme y dejó una actuación de campeón, peleando bajo condiciones extremas. Díaz confirmó un dato que pone el resultado en perspectiva:
“Lamont se rompió la mano en el quinto round. Lo confirmo para boxeomundial.com.”
Incluso con la lesión, Roach boxeó mejor, ajustó más y dominó lo suficiente para llevarse la victoria… pero los jueces vieron otra cosa.
“Es durísimo aceptar que Lamont ya debería ser campeón mundial en TRES divisiones. Pero los jueces nos volvieron a cerrar la puerta.”
Díaz remató con una frase que resume lo que siente todo su equipo:
“Él debería ser tres veces campeón del mundo, pero gracias a decisiones como esta apenas lo reconocen como campeón de una sola división. Eso no es mérito deportivo, es política.”
Para Díaz, el mensaje es claro y directo: Roach hizo el trabajo, dio la clase de boxeo y soportó una lesión grave… pero la localía y la política del boxeo le arrebataron una victoria que era suya.