
Salvador Rodríguez
Escritor ESPN Digital
Cada vez que un aficionado se presenta en una arena de boxeo, espera sin duda emociones fuertes. Está pendiente a una que otra sorpresa, quiere ver con la mano en alto a su peleador preferido y anticipa, evidentemente, muchos nocauts.
Sin embargo, hay veces que las cosas se salen de control y surgen instantes que quedan para la historia más por su notoriedad que por actos deportivos, como una mordida de oreja, broncas monumentales, aparición de karatecas y aterrizajes forzosos.
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