Las Vegas / Noche de boxeo en el Sam’s Town
Como siempre estuvimos presente en el evento de boxeo en el Sams Town de la empresa Pochiro Boxing quienes a gritos y sombrerazos siguen dándole vuelo a la hilacha montando tarima brava para el beneplácito de los fanáticos y los propios protagonistas. Y no solo los profesionales porque el zafarrancho comenzó con encuentros amateur.
En la primera pelea profesional a Charvis Holyfield empezó a tirar granadas a mansalva a pesar de que Richard Colas hacia lo posible para mantener la reyerta paralela mas al final de la campana a las 4 rondas no hubo duda que Holyfield fue superior para ganar la decisión unánime.
En la segunda riña Roshawn Mc Cain puso mano dura desde el principio y aguanto toda sublevación de guantadas de parte de Brady Rein que cayó en la inicial y eventualmente perdió la decisión de 4 asaltos.
En la tercer pelea Wilberth Lopez puso pista para asegurar cada aterrizaje de sus golpes en la división de los ligeros y su contrincante Bronson Shultz se ponía grosero tratando de intimidar con una derecha intrépida y una sonrisilla sínica presionaba sin tregua a pesar de que Lopez le escabullía con dureza las costillas, fue un combate sumamente cerrado pero los jueces se decidieron por Wilberth quien supo desplazarse con cautela sin dejar de poner una ofensa en oferta que le resulto ante los ojos de los jueces.
La categoría de 112 libras le resulto contra prudente a Yosigey Ramírez que si puso en marcha todo lo aprendido en el gimnasio, pegando a dos manos pero sin hacer mucho daño a un Oscar Vazquez que a leguas se miro que tendría un paseo en el parque y el réferi al ver que Ramírez de plano estaba recibiendo demasiados golpes sin mucha respuesta puso un sanseacabó en la tercer ronda.
La que si decepciono fue la pelea estelar engtre Jesse Carradine contra Antton Salughter en categoría superpluma porque ambos si califican para un tango pero no para el baile del oso ya que eran demasiado cautelosos, y hubo más amarrones que guantadas y en el cuarto asalto Jesse piso el azulejo y quien sabe a qué santo se habrá encomendado que le llego el regalo de Navidad prematuro al obtener un empate donde a mi ver hizo mas Slaughter para merecer la victoria, pero ya sabemos que donde manda capitán no gobierna marinero.
La encargada de cantar los himnos Nacionales de México y Estados Unidos fue Abril Cisneros de 8 años de edad que dejo sorprendidos a todos los presentes con su tremenda voz cuando se apodera de un micrófono.
La empresa Pochiro anuncio que retornaran en febrero para el próximo espectáculo de boxeo en el mismo hotel y ante la misma gente y los que se van acumulando. (Fotos: MIKE BRANDIMART)
JAIME ESTRADA
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