Las claves que originaron la pelea de revancha entre McGregor y Poirier
El irlandés Conor McGregor y el estadounidense Dustin Poirier se enfrentaron en septiembre de 2014, con victoria para el primero de ellos, a quien le bastó un solo round para imponerse por KO.
Desde entonces, ambos han seguido caminos diferentes dentro de la UFC. Conoce los episodios de cada uno por separado, que dieron origen a la segunda batalla entre estos dos peleadores, programada para el próximo 23 de enero, en una revancha que apunta para convertirse en auténtico clásico. Las apuestas UFC estarán muy pendientes de lo que acontezca, ¿cómo llegan ambos contendientes a la cita?
El camino de Conor McGregor
En julio de 2015, después de vencer a Poirier, McGregor se enfrentaría con el campeón Peso Pluma, el brasileño José Aldo, pero éste sufrió una fractura de costilla, lo que hizo que fuera sustituido por Chad Mendes, quien en el combate dominó ampliamente.
Pero McGregor asestó varios golpes limpios y se proclamó vencedor, a unos segundos del final del segundo asalto.
En diciembre del mismo año se concretó la pospuesta pelea entre McGregor y Aldo, pero en 13 segundos el irlandés liquidó al sudamericano, en la pelea por el título más rápida de la historia de la UFC.
En agosto de 2017 McGregor enfrentó a Mayweather, uno de los mejores boxeadores de todos los tiempos, que volvió al ring en una pelea de más de 100 millones de dólares. Y aunque McGregor no ganó, obtuvo fama y la riqueza.
En enero del 2020, McGregor regresó, ahora en peso welter, para luchar con el veterano Donald Cerrone, con quien acabó en 40 segundos.
La senda de Poirier
Mientras McGregor estaba ocupado luchando y ganando millones, Poirier buscaba volver al primer plano.
Poirier, en noviembre de 2017, venció al excampeón Anthony Pettis en Norfolk (Virginia), su segunda Fight of the Night en nueve meses. En abril de 2018, Poirier se vio con Justin Gaethje, quien sacó el colmillo y estuvo castigando la pierna del rival, además de recurrir a picarle los ojos. No obstante, el estadounidense, con su característica ráfaga de golpes precisos, paró la pelea en el cuarto asalto.
En abril del 2019 Poirier y el rey del peso pluma, Max Holloway protagonizaron un combate. En el que el primero se impuso con decisión unánime de los jueces y volvió a ostentar en su poder el oro de la UFC.