La mexicana Alma Ibarra da su versión sobre su retirada de la pelea contra la campeona mundial Jessica McCaskill
(Foto: Suministrada)
Semanas atrás vimos el caso de la boxeadora mexicana Alma Ibarra, quien se quitó de su encuentro con la campeona Jessica McCaskill, diciendo que valoraba su vida y quería estar con su hijo. Esto le costó críticas de algunos sectores de la fanaticada, pero más tarde ella publicó una carta que dice como sigue:
“Primero quiero agradecer a cada una de las personas que se han preocupado por mi, justo aquí se sabe quien vale la pena, quienes son los verdaderos amigos. Es fácil criticar sin saber el trasfondo de las cosas, nos hace mucha empatía como seres humanos y como dicen nadie sabe lo que hay en la bolsa excepto quien la carga”.
“Desde hace 6 meses entré en una depresión que solo 3 personas notaron, me era difícil levantarme de la cama e ir a entrenar, consideré retirarme, me dejé convencer que no era lo correcto después de tanto esfuerzo y continué dándome oportunidad haciéndome creer que todo estaba bien sin buscar ayuda profesional, luego llegó esta oportunidad y vi en ello lo que tanto había trabajado estos años, pero fue el peor error que cometí ya que fueron semanas muy complicadas, a pesar de todo procuraba dar lo mejor de mi siempre”.
“Después de semanas difíciles tuvimos un cierre de campamento increíble el cual nos ilusionaba, motivada en que tendríamos la victoria porque teníamos una estrategia bien diseñada, físicamente nunca había estado mejor y a pesar de que nunca había dado el peso de la pelea tampoco fue problema, pero algo muy profundo dentro de mi seguía sin estar bien, lo ignoré y en el momento crucial mi mente colapsó aunado a accidentes que había tenido. No escribo esto con afán de dar explicaciones a las personas porque nunca las tienes contentas, lo hago por 2 cosas:”
“Primero, para comprobar una vez más que la salud mental es tan importante como la física y más en este deporte y si sirvo de ejemplo es para beneficio de alguien. Segundo, para dar cara por mi equipo que no tiene nada de culpa, al contrario, agradezco que pasaron todo este proceso conmigo sin saber lo que pasaba por mi mente”.
“Hoy después de 15 años digo adiós al boxeo, un retiro que había postergado por 6 meses y hoy me da la paz y tranquilidad que mi vida necesita, me voy tranquila porque se que a pesar de todo siempre estuve ahí picando piedra y remando contra la corriente para salir adelante, gracias boxeo porque a pesar que fuiste muy duro conmigo me diste muchísimas alegrías e increíbles personas, me dejaste a mi mejor amiga y a Héctor que es el amor de mi vida”.
“Por favor, dejemos de romantizar que eso de que entre más sacrificada y sufrida sea tu vida como boxeador más mereces, nadie merece sufrir tanto para lograr sus metas, suficiente es soportar un entrenamiento tan duro, subir a un ring y todavía tener que complacer a fans de sillón que critican si no ven sangre. Primero estas tu, después tu y al final tu, nadie cuidara de ti o tu familia si algo llegara a pasar”.