De retirarse a campeón del mundo: Esteban Bermúdez
Esteban Bermúdez recibió su cinturón de campeón del orbe de las 108 libras de la WBA. Entusiasmado y a punto de las lágrimas, el boxeador recordó momentos fuertes que tuvo que pasar para seguir con su carrera en el pugilismo, como cuando se retiró por tres años y medio, tiempo que le ayudó a reflexionar y así fijar su objetivo que todo boxeador quiere: el campeonato del mundo.
“Se siente bonito (ser campeón del mundo), es algo a lo que todo boxeador aspira. Ahora viene lo más difícil y a echarle muchas ganas y demostrar que no somos campeones de una noche y que queremos durar”, señaló Bermúdez (14-3-2, 10 KOs).
A partir de su coronación, el púgil de Neza ha visto que la gente lo observa con respeto, pero sabe muy bien que no todos son catalogados como amigos.
“Es como todo, hay amigos reales, amigos que te hablan para otras ideas o gente que antes no te hablaba y ahora te llegan con otras ideas, pero no podemos cambiar, soy Bermúdez, soy muy humilde… no hay cambios de nada, creo que soy hasta más humilde que antes y agradecido con la gente que me ayuda”, reconoció.
Su padre Alberto Bermúdez, su madre María de Lourdes Salas, son sus dos principales motores y a quienes escucha para recibir un consejo.
“Mi papá me dice que entrene duro porque los chingadazos están duros, y a esto me dedico y quiero vivir, entonces mi mamá, papá y esposa, contentos de este logro y la verdad, no hay más como mis papás y esposa, familia, que siempre me apoyan, claro, todos son campeones, desde mi equipo de trabajo y mi familia”, precisó.
En la conferencia de medios en la que se le entregó su cinturón, el presidente de la WBA, Gilberto Mendoza, informó que posiblemente Esteban podría defender su título ante el súper campeón del organismo e invicto japonés Hiroto Kyoguchi.
“Es una pelea dura, pero no imposible, siempre he dicho eso, solo es cuestión de entrenar bien, y con la bendición de Dios. Vamos por más y a echarle muchas ganas”.
El pugilista manifestó que ya se encuentra próximo a regresar a la sala de prácticas con su entrenador Aarón Tapia, para no perder tiempo y estar a punto para cuando peleé.
“Ya llevamos casi tres meses desde que gané. Ya es tiempo de regresar y vamos a entrenar al cien y estar preparados para quienes nos avienten, a salir con el hambre de ganar”.
Para rematar, Bermúdez mandó un mensaje a todas las personas que pasan por momentos complicados.
“Cuando me retiré por tres años y medio, dudé mucho en regresar. Entre regresar y no, si tuve la espina. Entonces cuando regresé al boxeo me dije a mi mismo: ´yo puedo lograrlo´ y esto va para los boxeadores, los mismos trabajadores y estudiantes, solo hay que echarle ganas”.