Noche de combates Lion Fight 11 en el Hotel D del centro de Las Vegas

En lo personal, a mi no me atraen mucho ningún otro deporte que no sea el boxeo, pero tratándose de una función de Muay Thai montada a plena calle afuera del D hotel en la Fremont Experiencia, ya cambia el asunto, y además, para conocer en persona a la brasileña Christiane Justino, que es todo un fenómeno en las artes marciales mixtas, y estoy seguro que en la misma categoría welter de boxeo más de tres le sacarían la vuelta.

Y no es un simple comentario, esta chica de apodo “Cyborng” no se anda por las ramas, y la francesa Jennifer Colomb (que llegó como sustituta de la checa Martina Jindrova) supo que su rival no era nada ordinaria, porque a pesar de que Jennifer estaba invicta con 10 victorias, todas por la vía del cloroformo, no fue pieza para la ferocidad de “Cyborng”, que no necesita mucha experiencia en esta disciplina en si diferente a su experiencia en jiujitsu, pero se adapta de maravillas a cualquier deporte de contacto.

Con las pantallas por doquier, en el techo eléctrico de la calle y alrededor del cuadrilátero hizo acto de presencia la mujer más peligrosa del planeta en la disciplina de AMM, su bienvenida fue de júbilo y alboroto mientras ella lanzaba golpecillos al viento en su ruta al ring.

“Cyborng” pronto puso en evidencia su autoridad en contundencia. La francesa trataba de infundir respeto a base de patadas, pero Christiane no se achicopalaba para nada y seguía cortando camino y cortando cartucho para disparar con sus puños insolentes, Jennifer probó el polvo en dos ocasiones en caídas accidentales, pero sus costillas y rostro empezaban a mostrar la huella de tanto abuso y en el primer asalto, la francesa terminó con herida en el borde del ojo.

Para la segunda ronda, Jennifer de plano ya no sabía ni por donde le llovía granizo, y al caer otra vez a la lona, esta vez si se le contó como caída y si se armó de valentía para seguir en la rayuela del dolor, pero otra vez Justino atacando a mansalva a dos puños, pero Jennifer, a pesar de sentir fuego en las entrañas y en toda su humanidad no claudicaba, y llego la campana del cierre, pero no se puede decir que fue en su auxilio para pedir paz, sino para que le dieran más castigo, como lo decía la camiseta de la
brasileña.

En la tercer ronda Christiane sabía que la tenía ablandadita en todos aspectos y fue por el jaque y mate con patadas de giro en el rostro, en los chamorros, en el estómago, en fin, guantadas de toda índole y por doquier, hasta que de plano Colomb se desmoronó sin más aliento. “Cyborng” alzó los brazos, dobló las piernas, y puso su cabeza en la lona, contenta de su 13ª victoria, la onceava por la vía de Dios Morfeo, (con 1 derrota).

La pelea de la noche fue entre Kevin Ross contra Tetsuya Yamato que construyó puntos durante los asaltos iniciales para llevarse una apretada decisión. Ross terminó con hemorragia nasal, grietas en la ceja y en la frente, otra en el tope de la cabeza, donde le escurría sangre por la espalda en una pelea a leguas que fue sangrienta a base de patadas, guantadas, codazos, rodillazos etcétera. Yamato, quien tenía el parpado inflamado y una herida en el labio, soltó el llanto cuando escuchó el veredicto a su favor.

Todo mundo quedo contento, los que pagaron boleto de prestigio, los de las gradas generales y el público que desde la calle miro el evento gratis. En otros resultados Cosmo Alexadre le ganó la partida a Nampon, y Malaipet Sasiprapa fue demasiado para Caio Uruguai que fue salvado por la toalla blanca en el primer round, después de probar la lona varias ocasiones. En otras peleas de damas bravas, Ángela Hill derrotó a Monique Travis y Lauren Rojas dominó a Desiree Brandl.