Sobre el combate Beterbiev-Bivol: “Una pelea de boxeo se gana por la mayor cantidad de rounds ganados, no por un mejor estilo ni por conectar los supuestamente golpes más fuertes”
(Foto cortesía: Mark Robinson / Matchroom Boxing)
Ha finalizado la esperada pelea en Arabia Saudita entre Artur Beterbiev y Dmitry Bivol y el primero se ha convertido en el campeón indiscutido en las 175 libras tras su polémica victoria sobre Bivol y mejor que una polémica victoria, podemos decir polémica decisión, porque en peleas cerradas como esta, son simplemente los jueces los que deciden el rumbo del destino; pero a veces tienden a equivocarse y creo que esta vez se equivocaron.
La decisión favoreció a Beterbiev con una tarjeta con anotación de 114-114 , otra 115-113 y otra increíble 116-112 favorables estas dos últimas al nuevo campeón indiscutido y parece que de acuerdo a la apreciación de estos jueces y a la de algunos medios, el fallo se debió a que de modo general Beterbiev buscó más la pelea, de modo general Bivol evadió más la pelea y de modo general los golpes “más fuertes” los conectó Beterbiev.
Y repito la frase “de modo general” para hacer énfasis en que es un inconmensurable error anotar una pelea de acuerdo a una apreciación general y también es otro gran error anotar un round de acuerdo a una apreciación general y por lo que hemos escuchado en algunas entrevistas y hemos leído en algunos medios Beterbiev se merecía el triunfo porque fue quien la buscó y fue quien conectó los mejores golpes y aquí me detengo y pregunto: ¿alguno de los golpes de Beterbiev puso en malas condiciones a Bivol? a pesar de que el ruso llegaba con la etiqueta del gran pegador.
Este modo de apreciar una pelea de boxeo no responde a la verdadera esencia que no es sino la que el boxeador que obtenga la mayor cantidad de rounds es quien debe ser el ganador, pero parece que en este tipo de peleas tan importantes esto se olvida bastante; incluso algunos jueces suelen castigar a ciertos boxeadores cuando emplean un determinado estilo no de su gusto como por ejemplo el empleado por Bivol hoy que es el que emplea generalmente este boxeador.
No podemos dejar de señalar que Beterbiev y su esquina fueron bastante astutos en su estrategia de cerrar mejor algunos rounds lo que convenció, o mejor dicho, engañó a los jueces si consideramos que un round consta de tres minutos y si un boxeador ha conectado los golpes más limpios durante los primeros dos minutos del round, así su rival busque el combate durante el minuto final, es un round ganado para el primero.
Esto mismo ocurre en los llamados rounds de campeonato donde a veces se le dilatan las pupilas de los jueces y hasta se confunden y alcanzan a inclinarse en las anotaciones por un boxeador que ha ganado por ejemplo, de modo bastante convincente los dos últimos rounds de la pelea y olvidan los primeros diez cuando en realidad un combate se gana por la mayor cantidad de rounds ganados y no por la mayor cantidad de golpes fuertes, ni siquiera por la mayor cantidad de golpes conectados en general ni por un estilo determinado.
Es cierto que en muchas ocasiones cuando los rounds son cerrados, algunos jueces tienden a otorgárselo al que buscó la pelea independientemente del conteo de golpes conectados y me pregunto: ¿por qué?. A veces quien no la busca aparentemente es quien realmente hace prevalecer su estilo y su plan de trabajo como ocurrió hoy con Dmitry Bivol.
Podemos resumir que hoy en cuanto a esto de las estrategias y planes de combate, Bivol superó a Beterbiev porque prevaleció su estilo al no permitirle libertades a un Beterbiev cuya estrategia es casi siempre meter la presión y noquear. Hoy Beterbiev quedó frustrado, pero si regresamos a lo de la cantidad de rounds, no es difícil percatarse de que Dmitry Bivol empleando el estilo que haya empleado, marcando los mejores golpes en combinaciones al principio de los rounds y luego evadir a Beterbiev durante el final de los mismos para ganarlos en definitiva, triunfó sobre Beterbiev en cuanto a cumplimiento de un plan se refiere.
Bivol fue elusivo en los finales de round pero repito, un round tiene tres minutos, y la pelea tiene doce rounds. Bivol debió agenciarse al menos siete rounds (pienso incluso que el último debido a la mayor cantidad de golpes acertados) y por ende la pelea. Un juez debe ser frío e imparcial y debe estar atento a estos detalles; no debe castigar a un boxeador tanto en un round como en una pelea por evadir en determinados momentos el intercambio de golpes ni premiar al otro por simplemente ir hacia delante. No. Esto debemos entenderlo de una vez.
Una cosa es correr durante toda una pelea sin tirar golpes y otra muy pero muy diferente fue lo que hoy hizo Bivol al hacer prevalecer una estrategia sobre otra y quien para mi apreciación conectó los golpes más precisos en cada round. Bivol intercambió golpes cuando entendió que podía hacerlo, conectó lo necesario al principio de esos rounds para ganarlos y simplemente se movió luego para asegurarlos. Sin embargo, los jueces no lo apreciaron de ese modo. Beterbiev no quedó muy satisfecho con su actuación porque simplemente Bivol, al imponer su estrategia, no lo dejó establecer a él la suya.
No se debe emplear el término robo en estas peleas bastante cerradas pero hoy de acuerdo a mi criterio y al de miles de fanáticos según he observado, ganó Dmitry Bivol quien, de no haber sido por ese fallido trabajo de los jueces, debió coronarse en el verdadero campeón indiscutido. Esto requiere una revancha sin dudas.