FLASHES DE “CABEZA FRÍA” SOBRE LA PELEA NONITO-RIGONDEAUX

Dijo alguien que “Nonito seguirá siendo uno de los grandes”… ¿En qué división?, porque se rumora que puede subir de peso. Si se queda en las 122 tiene espacio del 2do para abajo, el primero ya se sabe.

Expresión tan lamentable que aparenta ser dicha por quien tiene problemas con la “fijación”: “Si se logra otra pelea, tendría que ser en otro peso…” El filipino no está claro en cómo le dejaron la cara ni en lo ridículo que lució. Otra pelea la tiene que buscar él y las condiciones, no solo porque perdió, sino por la forma cómo fue, por supuesto que no las deben proponer sus apoderados.

Ah, pero el Gran Ladrón, ex juez de Nueva York, volvió con la cantaleta de que “Rigondeaux no vende”. Teniendo a mano la circunstancia de que “en televisión quien no tira no gusta”, con el boxeo de Rigo voy a hacer un espacio justo: ENTRE WILLIE PEP (obsérvelo en 3 videos moviéndose) Y GUILLERMO RIGONDEAUX NO HAY DIFERENCIAS NI VENTAJA EN CUANTO A VELOCIDAD, PERO, SI SE FIJÓ BIEN EN EL AMASIJO SANGUINOLENTO COMO LE DEJÓ LA CARA AL ASIÁTICO, NADIE PUEDE PENSAR QUE, QUIEN LLEVÓ A CABO ESA DESFIGURACIÓN DE ROSTRO, HAYA TIRADO “POCO”.

En otro orden de cosas, Pep ganaba así, moviéndose así y golpeando así ¿Qué más se le va a exigir al cubano?

Rigondeaux alcanzó una forma física impresionante producto de la preparación que le hizo Pedro Luis Díaz, pero cumplió rigurosamente con la recomendación de Ramón Garbey, que fue su chief-corner. No dudo que le dejen a Garbey como entrenador general al campeón.

Desde la otra esquina: Robert García recibió a Nonito una semana antes del pleito, malo hasta cierto punto; sin embargo, dejó mucho que desear por la forma  como manejó la estrategia, porque, después de los dos primeros asaltos, en que se veía que Donaire no tenía cómo cortarle el paso al cubano, tampoco sacó de la manga un plan B que aguantara a su peleador en el medio del ring para obligar a Rigondeaux a intercambiar golpes. Podía hacerlo una vez que su peleador era el favorito.

No sucedió, pero nadie puede predecir cómo hubieran sido las acciones si el perdedor si no se hubiera dedicado a corretear detrás del cubano, sobre todo cuando su mejor golpe, con el que lastima, es el gancho de zurda, muy difícil de conectar cuando el contrario es zurdo y se mueve rápido.

Robert García decepcionó al perder esa pelea, porque la entregó él, sin temor a represalias críticas, ese tipo es como Roach: otro bulto que venden como “esquinero ciéntifico” de boxeadores.

Para catalogar la clase rotunda, demoledora y fuera de grupo de Guillermo Rigondeaux, que pueda colocarlo en la discusión de “lo mejor libra por libra” del pugilato de hoy, es necesario esperar por otras peleas que lo definan como un ganador sin cuentos, de la forma como hizo contra Nonito.

Para incluirlo entre los grandes peleadores cubanos de la historia YA ESTÁ, no creo que necesite más para acompañar a Chocolate, Gavilán, Mantequilla… en el grupo excelso de notables de Fistiana del boxeo criollo.