AKHMADALIEV DIO MEGA PALIZA A RONNY RÍOS Y RETUVO SUS CINTURONES

Murodjon Akhmadaliev recordó enfáticamente que el primer puesto en el peso pluma junior está en juego.

El campeón invicto de la AMB/FIB defendió su título con estilo, derribando a Ronny Ríos en el camino a un paro en el 12º asalto. Akhmadaliev derribó a Ríos a la mitad de la ronda final, y un ataque posterior obligó al árbitro Rafael Ramos a detener la pelea a las 2:06 de la ronda doce en su coestelar de DAZN el sábado por la noche en Tech Port Arena en San Antonio, Texas.

Ríos salió como un retador decidido, usando su fuerte jab para establecer manos derechas rectas. Akhmadaliev hizo un ajuste defensivo sutil para asegurarse de que la secuencia no se convirtiera en un patrón. Un recordatorio de la rápida ascensión de Akhmadaliev a la cima llegó en forma de un fuerte golpe que congeló brevemente a Rios.

Akhmadaliev controló la distancia y la acción en la segunda ronda. Rios lanzó un gancho de izquierda en la primera parte, pero tuvo problemas para adaptarse a los golpes al cuerpo de Akhmadaliev y al jab de derecha decidido. Ambos boxeadores usaron el palo como un arma más que como un telémetro, y Ríos se dobló en los últimos segundos.

Ríos tomó la delantera en la tercera ronda, intentando derribar al campeón defensor. Akhmadaliev tuvo éxito en el boxeo a la inversa, pero aun así se vio obligado a advertir contra el jab y la mano derecha larga de Ríos. El zurdo uzbeko conectó con un directo de izquierda por el medio, lo que obligó a Ríos a ajustar su ataque, lo que afectó su producción de golpes.

Akhmadaliev hirió gravemente a Ríos durante la primera mitad de la tercera ronda. Ríos comenzó fuerte el marco, pero se dejó abierto para un tiro al abdomen que casi lo hizo doblarse. Akhmadaliev continuó atacando mientras Ríos intentaba capear la tormenta, y el nativo de California regresó con fuerza al final de la ronda.

Aún así, ni siquiera la oleada tardía de Ríos pudo evitar un latigazo en la esquina entre asaltos. Ríos ofreció un enfoque más inteligente en la quinta ronda, evitando un tiroteo y dando un uso adecuado a su ventaja de tamaño natural. Akhmadaliev mantuvo el control en su mayor parte, pero fue citado dos veces por golpes bajos.

Akhmadaliev entró en la segunda mitad como un luchador con una sola mano. Rios se vio obligado a cubrirse cuando Akhmadaliev lanzó ganchos de largo alcance en la séptima ronda, rodeando constantemente al retador. Rios logró un gancho de izquierda pero no pudo sujetar al escurridizo Akhmadaliev, pero aceleró el paso en la mitad trasera del marco, soltando sus manos una vez que pudo cerrar la brecha.

Ríos fue sacudido por varios ganchos de derecha de Akhmadaliev en la octava ronda. Akhmadaliev ofreció un movimiento lateral constante para evitar que Ríos tuviera la oportunidad de devolver el fuego. El inquietante cambio en el impulso hizo que el entrenador en jefe de Ríos, Héctor López, se levantara, quien pidió más presión y menos tiempo contra las cuerdas.

El discurso solo en el sentido de que Ríos pasó la mayor parte del noveno asalto en el medio del ring. Akhmadaliev siguió marcando el ritmo, conectándose con jabs y ganchos de derecha, pero también ofreciendo un volado de izquierda por primera vez en varias rondas.

Un breve cambio de ritmo se produjo a principios del décimo asalto, cuando Ríos conectó un gancho de izquierda. Akhmadaliev se sacudió el golpe y finalmente volvió a lo que fue una actuación de exhibición del campeón defensor. Akhmadaliev aterrizó con su jab y un gancho de derecha completamente cargado, aunque Ríos atravesó los espacios y logró atrapar al zurdo con una derecha al cuerpo.

Akhmadaliev cargó con ganchos de derecha para comenzar la ronda once. Rios absorbió los que aterrizaron mientras bloqueaba parcialmente el resto pero no ofrecía una respuesta. El rígido jab de Akhmadaliev siguió molestando a Ríos, quien intentó atrapar a su enemigo con un jab combinado arriba y un uppercut de derecha al cuerpo. Akhmadaliev terminó el round con un gancho de derecha al mentón y un derechazo detrás de la guardia de Rios.

A Ríos se le dijo en términos muy claros que necesitaba un nocaut para ganar de cara al duodécimo y último asalto. En cambio, fue Akhmadaliev quien cerró el espectáculo con estilo. Un golpe al cuerpo paralizante obligó a Ríos a arrodillarse, superando la cuenta pero ya sin poder defenderse lo suficiente. Akhmadaliev acumuló el ataque al obligar al árbitro a rescatar a Ríos de daños adicionales.

La derrota marcó el segundo intento fallido de Ríos (33-4, 16KOs) de ganar un título importante. El nativo de Santa Ana, California, se quedó corto en un desafío de agosto de 2017 del entonces invicto campeón de peso pluma junior del CMB, Rey Vargas.

Akhmadaliev avanza a 11-0 (8KOs), haciendo la tercera defensa de los títulos unificados que obtuvo en una victoria en doce asaltos sobre Daniel Roman en su pelea Pelea del año en enero de 2020. El medallista de bronce olímpico de 2016 y acelerado pro está ansioso por unificarse completamente contra el campeón WBC/WBO, Stephen Fulton, pero podría verse obligado a enfrentarse primero al retador obligatorio de la FIB, Marlon Tapales.