¡Y el nuevo campeón superwelter del OMB, Miguel Cotto!
(Fotos cortesía: Tom Hogan / Golden Boy Promotions)
ase, puesto que a pesar de estar siendo constantemente aporreado no bajaba bandera ni se achicopalaba para estar como sombra ante el boricua quien se miraba espectacular con un plan de hacer estragos y desaparecer en el acto del lugar de hechos.
Cotto elegía el aterrizaje de sus guantadas de todo calibre y al japonés no le quedaba más que seguir poniendo presión pero con su gatillo congelado por la velocidad y sagacidad de Cotto que desataba una granizada sin límite luciéndose sin que importe que ya tiene 37 abriles y aun le sigue dando vuelo a la hilacha en la tarima brava como si tuviera 24.
Kamegai de plano perdió la brújula y hasta se apresuraba para pegársele a Cotto como una sanguijuela pero de plano Miguel tenia plano resolver todo lo que se le pudiera presentar.
Y Yoshihiro se miraba sin marca en rostro que denotara el castigo que estaba recibiendo pero en su esquina si escupía rojo.
Quizá su plan era acosar hasta cansar a Cotto que seguía penetrando de todo ángulo con combos, jabs, oper y todo lo que se le ocurriera lanzar, todo llegaba a su destino.
Todo estuvo a favor de Cotto, la música caribeña durante los recesos de los 12 asaltos, la raza latina que le tiene respeto por ser guerrero a prueba de fuego y el japonés llego como intruso en tierra hostil pero eso si con un aguante increíble aunque para alturas del noveno asalto los disparos de Cotto si lo hicieron sentirse como despeinado y no tuvo peine para acomodarse la greña, y hubo momentos en que se quejaba de empujones pero el referí no cayó en su treta. Todo dio fin como en un principio con Kamegai en vez de pedir paz apuraba el paso para recibir más guantadas y Cotto como todo un caballero lo complació hasta el último tlin tlin.
JAIME ESTRADA (vidaboxeo@cox.net)