Victoriosos Marcos Maidana y Erislandy Lara

Desde muy temprano hicimos camino de Las Vegas hacia Los Angeles donde Josesito López a base de meritos de bravura, se le puso mano a mano contra uno de los artistas más destacados en infiltrar sueño, importado de Argentina, de nombre Marcos Maidana quien no se anda con medias tazas y fusila sin tomar prisioneros en su avance sistemático en la línea donde el fuego calcina, abriéndose brecha con lujo de autoridad ante cualquiera que le pongan en su banqueta, dicho en otras palabras más elocuentes, busca y destruye.

Fue una confrontación pronosticada como guerra sin tregua bajo la hábil promoción de Oscar de la Hoya en el estadio Home Depo a viento libre el sábado 8 de junio, con las banderas de México, Argentina y Estados Unidos ondeándose al igual que las olas humanas y los cantos futboleros de ole ole en saludo al temerario “Chino”.

El cual subió al ring sin albricias ni atención como Josesito que si entro entre una humareda con una canción ranchera de buenaventura y sabía a ciencia cierta que la única manera de superar al Che era manteniéndolo a raya por su fama de pegada de patada de mula que obligaba a Lopez a recurrir al abrazo del oso, se desprendía sin despegársele mucho y Josesito tiraba a mansalva, más que cuando tiro la primer pelota en el juego de Los Dodgers en la semana.

Ambos se enajenaban en su ofensa con el olor a cloroformo en el ambiente, pero al ser detectado sin misericordia, Lopez se armaba de valor para invitar a Maidana al toma y
daca y se vio espectacular.

Continúo con esa misma cruzada y el público al grito unido de Si Se Puede. Al verlo tan decidido Marcos le empezó a sacar al parche.

Josesito crecido ya no dejaba que “El Chino” se le arrimara tanto, pero en el cierre del quinto asalto y en vísperas del sexto Lopez le dejo el timón a su rival en amores welters y pago con creces la osadía porque el de territorio de los tangos no se anduvo por las ramas la lastimarlo y ponerlo entre la espada y la pared al ton y son con el referí interponiéndose ante la barbaridad.

En la antesala tampoco apta para los epilépticos Erislandy Lara se enfrentó contra Alfredo “Perro” Angulo (en la foto) que llego con sus perros de pelea y su collar que al desamarrárselo del cuello significa guerra sin tregua.

Después de las presentaciones en la pelea categoría superwelter, el cubano Lara no se anduvo por las ramas y soltó las manos como “Pancho por su casa” en la humanidad de un aguerrido Perro que a pesar de buscar la presa no se la acababa por disparos de todo ángulo, pero no rajaba leña y seguía intentando cambiar el rumbo de una estrategia que no le estaba funcionando porque Lara parecía adivinarle toda intención y desaparecía de la escena con Angulo tirando disparos sin brújula.

Lara seguía protegiendo dientes, rostro y costillas con sus brazos y guantes y todo le funcionaba a la maravilla para hacer fiesta con el efectivo contraataque.

Lara con su puntería opacaba el ladrido del público que estaba del lado de Angulo quien traía de propaganda en su ropa de la ansiada Reforma Migratoria para miles de personas.

La historia de la pelea era Lara protegiendo la plaza, atacando a mansalva y al alba para no ser madrugado pegaba con tubo. Angulo seguía insistiendo en la zona angosta y su perseverancia tuvo su fruto al mandar al cubano a la lona en el cuarto asalto con un oper en la quijada, pero Lara se las ingenio para terminar el asalto en pie sin nada que lamentar.

Las acciones se emparejaron y “Perro” entonces si empezó hacer estragos en la muralla del cubano que eludía lo más que podía cuando se le acorralaba.

La tonada era de ton a son con ambos poniendo sus mejores galas en la línea y Angulo de nuevo fusilaba en el noveno mandando a Lara a besar el polvo, venció el tiempo y se las volvió a ingeniar para no provocar en sí mismo el caos.

Todo parecía que “El Perro” se saldría con la suya pero al ser conectado de lleno en el ojo se voltio y el referí puso un sanseacabó.