¿POR QUÉ AHORA?

 Por Andrés Pascual

El link del Diario las Américas amplía sobre el extraño y sospechoso interés de Bob Arum en un pleito entre Rigondeaux y Lomachenko; en dos palabras contradijo lo que presentó como justificación de HBO para desacreditarlo: “sería un éxito…” ¿Sí, no me diga?

Uno está muy viejo como para considerar “positivo” lo que diga un elemento como el ex juez de New York. Por lo general, todo lo de estos individuos tiene trastienda.

¿Acaso el amigo de la tiranía antillana ve un filón de oro en el horizonte si se concertara un bout entre el zurdo campeón mundial cubano y Vasil Lomachenko? sin embargo, yo no veo la mínima diferencia entre el ex soviético y cualquier otro que hubiera podido enfrentar Rigondeaux que, como obstáculo, siempre encontró “lo aburrido del estilo del oriental”, que tantos vómitos produjera en las preñadas solteras de HBO y en la vieja inseminada a destiempo que representa a TOP RANK.

Dos razones sobre el tapete: le han dicho que Lomachenko pudiera ganarle al cubano y quiere terminar con los fiscales que lo han acusado de estorbo a propósito en el desarrollo laboral del cubano, o el miedo que le tiene a Haymon es tan grande que intenta experimentar en horizontes obligatorios, que desechó para complacer las exigencias de los Castro; porque Rigondeaux, como Lara, se convirtieron en la piedra en el zapato de la tiranía cuando destaparon la gandinga comunista y en nada solidaria como “hermanos hispanos”, mucho menos respetuosos de los derechos humanos, de Chávez y de Lula. Tal vez en una de las dos suposiciones esté la carta ganadora que explique el interés del promotor.