Mónica Acosta retuvo su cinturón ante Darys Pardo
Foto: GASTÓN MASCIOTTA
ARGENTINA – La pampeana Mónica Acosta defendió su cinturón superligero de la Asociación Mundial de Boxeo tras propinarle un nocaut técnico en el cuarto asalto a la colombiana Darys Pardo, en el fondo de la velada llevada a cabo en el Gimnasio Municipal de Esquel, Chubut, el pasado viernes.
A sus 35 años y luego de cambiar de promotor (Ahora se encuentra bajo las huestes de Osvaldo Rivero), Mónica “La Gata” Acosta (18(4)-0-2) realizó su primera presentación en 2013 y lo hizo con creces. Su rival, Darys “La Leoparda” Pardo (25(20)-23(6)-3), de 37 años, no mostró un buen estado físico y no fue exigencia mayor para la argentina.
Vale recalcar que justamente Acosta se coronó campeona superligero C.M.B ante Darys Pardo, el 19 de junio de 2009 en General Villegas, Buenos Aires. Además la colombiana se enfrentó a otras argentinas en su carrera, como por ejemplo Érica Farías y Fernanda Alegre, con quienes perdió por la vía rápida en el octavo asalto y por nocaut técnico en el séptimo, respectivamente.
Desde el primer tañido de campana ya se notó la diferencia de calidad de una y otra boxeadora. Acosta salió a mantener distancia con la zurda en jab. Pardo intentó penetrar la guardia rival con voleados de poca precisión, ya que pegaban en la guardia alta de la pampeana. Aun en la corta distancia, la argentina dominó con sus cruzados, mientras que la colombiana trató de embocar alguna derecha muy anunciada, de largo recorrido y escaso rigor.
La segunda vuelta siguió la misma trama, Acosta y Pardo atacando en la larga distancia, con manos rectas y voleadas. La pampeana tuvo mayor exactitud y si bien la barranquillera también acertó, sus golpes carecían del poder y la justeza que los puños de su contrincante ofrecían.
En un achique de trayectos, se produjo un choque de cabezas accidental pero que no logró condicionar el proseguir de la pelea. Desde allí, la bicampeona mundial salió con mayor vehemencia y desbordó por breves instantes a la retadora, quien también pudo conectar de contragolpe.
Sin embargo, la pelea continuó favoreciendo claramente a la local. Acosta siguió dominando la pelea en la larga y cuando logró acortar la distancia imprimió gran cantidad de ganchos y cruzados en la humanidad de su adversaria. Pardo, contra las sogas, no tuvo otra opción que utilizar su monótono movimiento de cintura y cubrirse, para luego lanzar alguna mano como salvavidas pero no tuvo la precisión necesaria. Acosta pareció estar practicando sus envíos con un cielo-tierra. Pardo siguió de pie solamente por su corazón.
Justo luego de sonar la campana del cuarto round, voló la toalla del rincón de Darys Pardo. La pelea había llegado a su fin, ya que no tenía sentido que la colombiana siga siendo avasallada y sin respuesta alguna.
Para Mónica Acosta significa un buen comienzo de 2013, que la ayuda a proyectar nuevos desafíos en manos del promotor argentino que puede mover mayor cantidad de piezas para tener mejores chances en el exterior o mejores oponentes.
Por otro lado, Darys Pardo tendrá que pensar seriamente en proseguir su carrera como boxeadora profesional. Antes de la pelea con Fernanda Alegre, se encontraba retirada. Luego de ella, dijo que no volvería a boxear. Lleva 16 años de carrera, fue campeona interina ligero CMB, pero ya tiene 37 años y sus últimos resultados señalan que su rendimiento ha bajado de forma notable. Está recibiendo más castigo del que debería. Es mejor preservar la salud, que a veces, ganar una bolsa tentadora.