Marcos Maidana / Fue un ‘Problema’ para Adrien Broner

(Foto cortesía: ERIC GAY-A.P.)

Dicen por ahí los sabios que más fácil cae un hablador que un cojo y Adrien Broner gritaba a los 4 vientos que sería la octava maravilla del boxeo y que no le preocupaba para nada Marcos Maidana, aseguraba que “El Chino” se las iba a ver negras, que él era un problema, un monarca que defendería con destreza su corona welter AMB y bla bla bla.

El argentino quien es de pocas palabras pero con puños de cuidado en el ring se limito a decir que el llamado “Problema” seria la vaca y el representaría al toro en el Alamodome de San Antonio donde Maidana no era el favorito de los momios pero si de la gente en su mayoría de color de piel canela.

Pero vamos por partes para no perderle el hilo a esta riña que bien puede ser candidata a una de las mejores de este año que esta caducando:

Broner fue a su destino cepillándose el pelo, rapando con un ejército de gente de respaldo que hasta traían mascaras de ex presidentes y claro, sitiándose astro, algo así como uno de mote Money, es mas hasta mencionaba dinero en letras grandes en su vestuario

Desde que sonó la campana, “El Chino” entro agresivo sin calentar motores y Broner se resorteaba en las cuerdas, amarraba, trataba de escabullirse y oraba, porque estaba en medio de un complot de guantadas que lo depositó en la lona y en un momento que tuvo al argentino de espaldas, le dio una empujadita pervertida para consolación de lo duro y tupido que le estaban dando.

En la segunda ronda seguía la misma tonada de la tanda de cuero que Broner con gesto decía que no le dolía, Maidana continuaba tirando bombazos que hicieron que Adrien acabara el asalto con sangrita en su rostro y muy confundido con el verdadero problema que tenía enfrente.

Broner al fin despertaba de su letargo y ponía ofensa de resistencia, pero de nuevo “El Chino” intrépido entraba a dos manos haciendo daño y compensando con un jab en lo propuesto, “El Problema” seguía negando que estaba en problemas.

Maidana continuaba metiendo las manos a sus anchas hasta que Broner tratando de llamar la atención del referí de algo que solo el sabia le hacían, se ponía las pilas y detenía en seco a su rival al aceptarle un toma sin tregua y cuando le dolía seguía con la cancioncita de moda; no no no el coco no! el coco no!

Pero sin discriminar, hay que reconocer que Broner supo salir del aprieto y hasta tener el timón del combate a la mitad de la contienda, con una estrategia de hacer que Maidana retrocediera y eso era un territorio donde “El Chino” no se sentía confortable.

Pero las cosas volvían a ser como empezaron con Marcos con nuevos bríos atacando a mansalva y Broner todavía con el mohín de cabeza de negar que le estaban dando hasta para llevar.

Broner con determinación volvía apoderarse de la plaza cuando de pronto la zurda de Maidana volvió a ser efectiva y Broner otro vez a la lona, se levanto y “El Chino” como tiburón que tiene a la presa herida en alta mar se le fue encima, pero “El Problema” pasa ganar tiempo amarro hasta con la uñas y el argentino en afán de quitárselo de encima, levanto con frustración la cabeza y Broner hizo el teatro de su vida revolcándose en un dolor indescriptible buscando la descalificación de Maidana, y el referí se fue con la finta y descontó un punto por la supuesta intención de cabecear a la malagueña

Pero ese árbitro no fue neutral porque después de advertir una y otra vez a Broner de no aventar nunca lo amonesto y en serio, Broner siguió empujando y para nada lo amonestaron, en fin el octavo asalto lo cerro Maidana con ganas de acabar de una vez por todas y Broner ya no hallaba que hacer si responder a la ofensa o dar el abrazo del oso, optaba por la segunda opción.

Marcos con un método de cierre de brecha efectivo buscaba el golpe de lotería y Broner de plano no era para nada el reflejo del astro que a todo mundo le había comentado, y ya se había aprendido de memoria la tonadita del “no no no, el coco no coco no”.

Pero en el onceavo Adrien puso la riña más interesante con disparos a quema garra, pero en un momento de giro Broner quedo de espalda y Maidana, ¡ándale chiquito!” le devolvió la empujadita que le dio en el primer round.

“El Chino” poniendo todos los kilos en cada intento y Broner le hacia la seña que le siguiera tirando y cuando la campana llego, con astucia Broner logro asestarle un buen golpe en la quijada que llamo la atención del doctor que miro si no estaba en malas condiciones y si que se miro confuso en el primer minuto del último asalto, pero nunca bajo bandera y no hubo sorpresa en las tarjetas oficiales.

Todos vieron ganar a Maidana al cual le tenían una corona lista y Broner indignado quizá por el resultado no soporto mas ser el intruso de la novela y se fue a su camerino, pero en el camino se llevo una lluvia de basura, por payaso de no querer dar su versión de los hechos, demostrando ser un mal perdedor porque hizo muchas olas durante la propaganda, para ser el centro de la atención, pero no soporto ser superado de ton a son y rehusó entrevista hasta después de estar en su camerino, porque las cosas no salieron como las había pronosticado. Y muchos argentinos celebraron con cantos como si fuera un partido de futbol soccer al omitir ¡Chino, chino, chi-no, chi-no!

JAIME ESTRADA
vidaboxeo@cox.net