Manny quiere cerrar su trayectoria con broche de oro

Y la legacía de Pacquiao aun sigue vigente en el mundo del boxeo

Por Jaime Estrada (fotos Raymond Spencer)

Fotos Raymond Spencer

El tiempo tarde que temprano da la factura a todos y más en el boxeo donde los participantes se aferran a seguirle dando vuelo a la hilacha en años impropios, o sea después de alcanzar los 31 ya muchos lo han dado todo y si no tienen consciencia y se aferran a seguir en la zarandeada pueden sufrir consecuencias físicas que muchas veces se ridiculizan durante un combate al sufrir lesiones en hombro, espalda, rodillas, cadera etcétera, y ahí si le dan vuelta a otro episodio de sus vidas sin el compromiso de darse de guantadas con otro semejante como medio de ganarse la vida.  Y el sanador filipino Manny Pacquiao quien hace como 5 años hizo público su retiro, pero de los dientes hacia afuera porque retorno en menos de tres meses y a sus 40 abriles sigue en la tarima brava contra rivales que de algún modo se han ganado un nombre en el deporte, y el pasado sábado Pacman subió al ring como campeón welter ante una audiencia de 13,025 en el MGM donde hizo una faena de dominio con su clásico ataque a mansalva ante uno de los pugilistas mas arrogantes que es Adrien Broner quien fue atribuye el veredicto en su perjuicio a los intereses políticos de promocionar la revancha de Manny contra Floyd Mayweather quien en febrero cumple 42 años y como le encanta buscar la feria con ventaja acepto una pelea exhibición en Japón ante un chamaco muy verde el cual no le duro ni para una muela.

En fin, Manny al parecer logro una paga de  $150 millones al enfrentar a Mayweather quien está analizando salir de la jubilación por otra tajada de millones a su cuenta bancaria y sin lugar a dudas hay suficiente morbo para que los fans se vayan con la finta y compren esta pelea.

Y volviendo al inicio de este articulo, Pacquiao no salió ileso del combate ante “El Problema” quien al parecer de un golpe le lastimo un ojo que bien puede ser desprendimiento de retina y es cuando la decisión de seguir se tiene que analizar muy detenidamente, ya que puede ocasionar serios problemas de salud y en caso del filipino hasta la vista podría perder. Pero no vamos a ser tan pesimistas y esperemos que todo salga bien en los estudios y sea un simple raspón sin importancia que para nada sea un peligro. (Imágenes Raymond Spencer).