Los RANKINGS son un relajo
Por Andrés Pascual, Diario las Américas,
USA, 12 de septiembre de 2010.
Antiguamente, y hablo de antes de 1965, los rankings del pugilismo de 8 pesos y un campeón para un organismo principal y otro estatal, los hacia el “maestro” Nat Fleischer, editor y propietario de la famosa revista The Ring, considerada la Biblia del Boxeo. Fleischer fue un gran amigo de Cuba y de “su gente de este deporte”, visita frecuente a la capital, que premió a los ganadores del primer torneo Guantes de Oro en 1938 en La Habana.
La única frase que puede definir el entorno de las clasificaciones del boxeo profesional de hoy es “falta de respeto”; pero, si se tuviera que sintetizar el concepto, nada mejor que “relajo”: lo que hay es un soberano relajo.
Antes hubo problemas con los escalafones: mover a un peleador que ganó a un puesto mas cercano a la pelea titular, o bajar a otro que perdió el lugar de privilegio que ocupaba; incluso sacarlo o introducirlo, pero no fueron ni tan frecuentes ni tan graves en cuanto a violación del carácter de seriedad. Tampoco existían tantos organismos como chinos.
El rosario de organizaciones que rigen el boxeo de hoy, la cantidad de cinturones y de escalafones que se necesitan, en cualquier momento estará proponiendo el acta de peleadores que fallecieron, o que, hace tanto como 25 años que no actúan para explotar sus nombres.
Es demasiado…demasiado de todo, pero la irresponsabilidad y la poca preocupación por el estado de salud de esta disciplina, subordinada al éxito del concepto artístico y económico sin brillo deportivo, tienen al deporte de “las narices chatas y las orejas de coliflores” en peligro. De una lista de Dan Rafael, cronista del sector del sitio ESPN, aquí les dejo cinco casos insoslayables:
En el tope de 40 peleadores light heavyweight considerados por el Consejo Mundial no aparece Bernard Hopkins; mientras, Joe Spin (¿lo conoce alguien?), descansa en el puesto # 17. Eric Morales solo tiene una batalla en 3 años; sin embargo, para el Consejo no es problema y lo colocan en el # 2 de las 140 libras. Antonio Margarito, que perdió una pelea y el puesto escalafonario por la conocida violación ética previo al bout contra Mosley, es el # 1 del organismo que preside José Sulaiman en las 154.
Para los eruditos de la organización del CMB, Julio Cesar Chávez jr. esta clasificado # 1 en los medianos y Paúl Williams es # 2.
El colmo de la aberración se produce con Kelly Pavlik, a quien Sergio “Maravillas” Martínez le dio lecciones dignas de un manual de kindergarten al humillarlo con fuerte dosis de ridículo, insuficiente para que el nativo de Ohio ocupe otro lugar que no sea el # 1 en la clasificación de las 168 libras, más otro condimento raro y exótico: todavía no ha debutado en el peso.
Entre 1963-66 Sugar Ray Robinson y Willie Pep boxeaban en arenas de mala muerte por sumas tan miserables como ridículas y no estaban en ningún escalafón.
Luego de perder su fortuna en el Crack Bancario de 1929, el judío Benny Leonard (foto) regresó por algo más de tres peleas, sin embargo, ni al Garden ni a ninguna cantidad superior a 150 dólares…
Hablé de tres emblemas de Fistiana, de símbolos de lo que verdaderamente debe ser el boxeo en clase profesional, ni de Chávez jr. ni de Pavlik, que nadie sabe si podrán instalarse en el Salón de la Fama cuando terminen; pero, como van las cosas, tampoco se debe dudar…