Lomachenko resultó indescifrable para Rigondeaux y lo obligó a abandonar la pelea en el séptimo round
El combate no fue lo que muchos esperaban
Vasyl Lomachenko
En una pelea que se había calificado, previamente como uno de los combates cuyos rivales reunían la mayor calidad técnica en los últimos años, el ucraniano Vasyl Lomachenko resultó absolutamente superior al cubano Guillermo Rigondeaux, quien prácticamente, se abstuvo de presentar combate y se dedicó sólo a defenderse y aferrarse al cuerpo de su rival, decepcionando a sus parciales y al público en general. Para colmo, al finalizar el 6to round, llegó a su esquina y dijo que no podía seguir debido a una supuesta lesión en su mano izquierda. Asi, Lomachenko que ganaba ampliamente en las tarjetas obtuvo otro triunfo por el abandono de su frustrado rival.
La pelea fue un monólogo por parte del ucraniano que atacó con velocidad al santiaguero, quien no encontró jamás, la forma de poder anular el ritmo del campeón, ni tampoco sus ofensivas con ambas manos. Rigondeaux trataba de ensayar contragolpes con la izquierda para anular el Jab de derecha, de Lomachenko pero este, o era demasiado rápido, o empleaba otro tipo de ataque que llegaba a la humanidad del cubano.
Lomachenko empleaba distintas formas de ataque que no daban tiempo a Rigondeaux a adaptarse a ninguna para tratar de anularla y contragolpear. Vasyl lo hacía todo, muy rápido y bien. Estaba perfectamente sincronizado en brazos y piernas. Rigondeaux, que a pesar de ser más bajo, tenía mayor alcance de brazos, buscó infructuosamente utilizar su Jab de derecha a ver si dominaba la distancia, pero la rapidez y el Estado de Alerta, superior, de Lomachenko se lo impidieron.
Fue así como, completamente frustrado, Rigondeaux decidió abandonar el combate dejando de manifiesto su impotencia ante este Lomachenko que sigue luciendo invencible. La supuesta lesión de la mano, aunque no es imposible, es difícil de creer. ¿Cuándo se la lesionó? ¿Pegándole a que? Si ni siquiera la lanzó, casi. Por supuesto, este resultado deja insatisfecha a la afición que esperaba otro tipo de pelea, aun cuando ganara el que no se esperaba. Antes del combate, Lomachenko era ligeramente favorito, pero Rigo tenía su buen grupo de seguidores.
¿Fue sorpresa?
La verdad, la pelea de Lomachenko, su estilo, velocidad y calidad boxística no sorprendió a nadie. Es lo que se le ha visto desde que es Profesional. Además, su record en Aficionado de 396-1, nos dice a las claras que, desde sus inicios, es un peleador “De Otra Galaxia”. Ya en Profesional, comenzó su carrera, de una vez contra los grandes y en su segunda pelea derrotó al que hoy por hoy, es el Mejor Pluma del Mundo, Gary Russell Jr. Luego perdió por decisión ante el Guerrero mexicano Orlando Salido quien, con todo y su gran experiencia, terminó la pelea, prácticamente “Gateando”.
Conquistó la corona Pluma y la defendió en diferentes oportunidades, con éxito. Subió a Ligero Jr y despachó en forma fulminante al boricua Rocky Martínez. Su carrera ha seguido un ascenso meteórico, venciendo en forma abrumadora a rivales como el jamaiquino Nikolas Walters, el colombiano Miguel Marriaga, al puertorriqueño Jason Sosa y ahora, al cubano Guillermo Rigondeaux.
¿Es invencible, en estos momentos, Vasyl Lomachenko?
Nos atreveríamos a decir, que si. No tiene gran estatura, pero cuenta con una velocidad mental, de manos y de piernas, que resulta insuperable para los púgiles que en estos momentos, militan en los Ligero Jr y en categoría cercanas. Se habla de peleas entre campeones como Lomachenko-Micky García o Lomachenko Linares y hasta Lomachenko-Crawford. Desde luego que los tres rivales tienen mucha calidad y por consiguiente, serían difíciles, pero hay algunas consideraciones que parecen indicar que el ucraniano tendría mucho chance.
Micky Garcia es alto, lanza puños y tiene fuerte pegada, pero Lomachenko es muy superior en velocidad y sus desplazamientos de piernas, que le sirven para disparar sus balazos desde distintos ángulos, lo cual podría ser mortal para un hombre como Micky García quien, por lo demás, no ha mostrado gran fortaleza en la mandíbula. El venezolano Linares tiene un elegante boxeo, depurada técnica y buena estatura, sin embargo, no es consistente en su ataque en el ring. Pareciera cansarse y dedicar momentos determinantes a recuperar el aliento. Además, su mandíbula lo ha traicionado varias veces y con Loma, la tendría a prueba.
El nativo de Omaha, Nebraska, Terence Crawford, se vale de su gran estatura, alcance y guardia zurda para abrumar a sus rivales y vencerlos, en muchas ocasiones por Nocaut. No obstante, contra el cubano Yuriorkis Gamboa, que es del tamaño de Lomachenko o hasta más bajo, lo vimos tambalearse ante algunos derechazos del guantanamero, que lo atacaba a base de velocidad. Ese factor podría prevalecer en un hipotético combate. Esta pelea, en teoría, luce imposible, porque Crawford parece decidido a saltar a los Welter, mientras que Loma, de subir, sería para los Ligeros. Hoy en día el ucraniano está tres divisiones más abajo en relación a Crawford.
¿Y Rigondeaux?
Pese a haber decepcionado en esta oportunidad, consideramos que Guillermo Rigondeaux no está acabado. Peleó con un Fenómeno, dándole ventajas de peso y edad. Podría, tranquilamente, volver a los Supergallos o subir a Peso Pluma donde podría enfrentar rivales muy interesantes como Carl Frampton, Leo Santa Cruz, Oscar Valdez, Gary Russell Jr, Lee Selby, Abner Mares, Jesús Rojas, bueno, infinidad de buenos oponentes que le podrían reportar históricas victorias y gran remuneración en $$$.
https://youtu.be/YswloyoPtjA