¿LA PELEA? ¡QUÉ PELEA!

Por Andrés Pascual

La segunda exclamación será posible si el pleito se convierte en una guerra, porque, si “degenera” en una exhibición de buen boxeo, en una cartilla digna de emplearse en gimnasios como “la guía del buen boxeador”, de antemano se sabe que la van a descalificar por “mala, por pala o por quién sabe qué” y al moreno lo van a tildar de “gallina prieta”, de cobarde…de todo lo que uno lee y oye de parte de un fanático mal acostumbrado por la yunta maldita que forman la promoción y cierta prensa.

El encuentro de mañana en Las Vegas “NO PUEDE SER” una exposición del antiguo arte de Fistiana, “dar y que no te den”, sino un traslado de la bronca callejera, “barefist” o “a puño limpio”, al ring del MGM; combates en los que escasean las reglas ordenadas y obligadas del Marqués de Queensbery; el boxeo “moderno” parece regido por Londres del siglo antepasado con modificaciones: usan guantes, 12 rounds y decretan nocaos sin estarlo realmente un pugilista vía “técnico”, que no hay quien entienda eso de “técnico. Es lo que busca el fanático, sangre, derroche del líquido escarlata todo el que se saquen a golpes.

Fíjese en las batallas campales perseguidas por la policía en parqueos-sótanos neoyorquinos, o de otras ciudades dentro y fuera del país, son salvajes, con todas las  (suciedades) permitidas y ninguna efectividad técnica, porque, en realidad, lo técnico brilla por su ausencia, analice por qué el creciente interés por el UFC. Hay una involución social hacia la caverna, de gusto regido por el instinto animal por la violencia. Un individuo, EI, se graba cortándole la cabeza a otro, como acción, es digno del siglo III.

Hay un público acostumbrado al boxeador fajador, no le interesa ver un sidestep elegante que deje al contrario sin equilibrio, desarmado a la defensa y listo para recibir el contragolpe, no, hay que tirar sin medir las consecuencias, caminar de frente todo el tiempo y, ni de juego o por precaución, contabilizar lo que se recibe como, más que negativo, dañino, tanto que ha sido letal innumerables veces. De acuerdo al comportamiento de muchos boxeadores, parece que esquivar es una agresión a la moral, a la hombría del individuo.

La mayoría de las peleas entre fajadores, si no terminan por nocao, PARECEN TABLAS, cualquier votación es a libre albedrío por la cantidad de golpes que envían y reciben, a veces con un toque de mala idea en las tarjetas, si alguno fue señalado ganador antes de subir, otro argumento común que desacredita a la disciplina cada vez que sucede.

Algunos dicen que la de mañana será monótona, es decir, aburrida, capaz de arrancar bostezos al valiente que se quede ante el televisor, muerto de sueño, pasada la medianoche, entonces será domingo.

Todavía no puede comentarse y ya dan ganadores “flat”, la mayoría a Pacquiao, incluso por nocao, un hombre que no anestesia desde hace más de 100 rounds ó 6 años. Arriesgarse así es una irresponsabilidad, porque, a lo mejor noquea, pero…si Pacquiao no noquea ¿Podrá ganar por decisión?

Todo pudiera pasar mañana, pero hay algo digno de comentarse: ESE PUGILISTA SEPIA ESTÁ CONSIDERADO LO MEJOR DE LOS ÚLTIMOS AÑOS y hay quienes lo irrespetan con facilidad meridiana. Si descuento a Roy Jones jr, que lo superaba en todo, en realidad, durante esta era miserable para el boxeo, no ha habido otro como Floyd.

Mayweather jr ha enfrentado a algunos como el filipino, fajadores, Maidana por ejemplo, mejores aún, estilistas de clase como Mosley y no lo sometieron, sino que los dominó, porque se ajusta rápido a lo que nunca vio o no repite errores y en eso se asemeja a Robinson: tiene la capacidad de resolver por sí mismo, al fragor del combate, cuando la esquina está a 6 millas del ring.

Pero el Senador NUNCA ha enfrentado a un boxeador como el de mañana, capaz de defender el sitio como hace y de contragolpear con efectividad y puntería de maestro.

Si el protegido de Al Haymon pierde esa pelea, entonces la arreglaron buscando “la otra”, que, nadie lo dude, habría que considerar seriamente que pelearon bajo el recurso de la cláusa inmoral, la revancha obligatoria firmada de antemano, porque, quienes mandan en el boxeo son HAYMON y el PRETTY BOY, este último, por la cantidad de ventas que produce pronunciar su nombre. Si Pacquiao pierde, para su casa y a convencer a 10 senadores más a ver si no ejecuten a la mujer por la que pidió piedad y compasión.

A propósito, leí un artículo en ESPN sobre la vida deportiva de May, el hombre aseguró que su única derrota fue en 1996, durante los JUEGOS OLÍMPICOS, sin embargo, yo lo vi perder contra JOSÉ L CASTILLO en la primera de dos, que no cuesta nada decirlo y, porque le robaron la decisión, no dejo de hacerle honor merecido. Por aquella pelea Mayweather jr no podrá empatar a Marciano ni si gana 49 ni superarlo con 50, 51… porque el ítalo no dejó margen a dudas nunca, jamás aceptó regalos durante su gloriosa carrera.