La nueva normalidad de la dulce ciencia en la capital del entretenimiento, Las Vegas

 

Por Jaime Estrada vidaboxeo@cox.net

 

Como reportero ahora tendré otra realidad, escribir lo que pasa en el ring viendo el combate por una pantalla en vez de disfrutarlo en vivo y a todo color por culpa del brote de la pandemia, y lo que más me duele que se acabara mi colección de credenciales de prensa, pero ni modo hay que adaptarse a la nueva realidad de vida y darle espacio a la adrenalina del deporte de las chatas y orejas coliflor.

Como ya saben, la empresa Top Rank realizo su cartelera de retorno a las actividades boxísticas en el centro de convenciones del MGM de Las Vegas por la cadena ESPN con un reducido grupo de personas (la mayoría con cubre-bocas), sin público presente, dos que tres camarógrafos, comisionados, equipo de los participantes, referí etecetera etcétera, (solo media docena de combates por funcion).

En la pelea estelar peso welter fue a cargo de Antonio Demarco contra Giovai Santillán que empezó cortando brecha a diestra y siniestra, pero al menos en mi opinión Demarco más económico en sus disparos tenía a su favor la efectividad de golpes variados.

Giovani no rajaba leña y se metía de lleno en la línea donde el fuego calcinaba y activaba su pistón automático de golpes para tratar de no dejar ni resollar a su contrincante. Fue una riña sin cuartel, sin dar tregua, protagonizada en la zona angosta, ni uno de los dos quería dar su brazo a torcer y el veredicto se antojaba con la balanza tablas.

Durante la segunda mitad Demarco pareció tener control del cierre de avenidas y con perseverancia desmantelaba toda sublevación activando su arsenal de oppers, ganchos y otros golpes efectivos, y a leguas se notaba que ambos estaban pidiendo fuerzas del alma al acercarse el decimo y último asalto con la balanza todavía tambaleante orillándose en ambas esquinas.

Al final de la noche uno de los jueces pinto empate y los otros dos 96-94 a favor de Santillán que mantiene su invicto con 26 victorias, 15 de ellas por la via del cloroformo

En mi tarjeta tenia los mismos números pero ligeramente a favor de Antonio Demarco que digiere su sexta derrota en sus últimos 8 eventos para palmares de 33-9-1 con 24 electrocutados.

Y bienvenido de nuevo el boxeo en Las Vegas con todas las medidas de precaución ante ese enemigo que no tiene pies ni manos pero que sigue causando estragos por doquier el tal coronavirus. Tan-tararan.

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