LA BAJA EN EL RENDIMIENTO DE SOLÍS Y SU RUPTURA CON PEDRO L DÍAZ

 Por Andrés Pascual

Hay trainers que influyen muchísimo en sus pupilos, más que los apoderados, antes, el manager que no estuviera “a bien” con el entrenador no podia controlar al peleador, pero eso fue en Cuba durante la época que a los perros los amarraban con longanizas y no se las comían de la hartura, parece que en estos tiempos no funciona esa filosofía.

Cuando Cuco Conde quiso piratearle a Mantequilla y a Ultiminio a Benito Fernández, compró a Kid Rapidez, que valía menos que un cabo de tabaco de 3 días en la acera, pero el par de jóvenes pugilistas no tenían precio en el Mercado mundial por sus condiciones, entonces el entrenador, que, a pesar de ser mala persona era bueno de verdad en su labor y, como Luis Sarría, trabajaba para el departamento boxístico del gobierno, creó las bases para hacerle insoportable al caballeroso y decente Benito la relación con los dos pugilistas, por lo que le vendió al racquetero los contratos de las dos futuras glorias en embrión.

En la Cuba castrista no funciona nada de esto, la única fuerza de imposición, irrevocable, es el Partido Comunista; cualquier languidecimiento basado en nostalgias y pedanterías sobran, en la Isla solo hay un reclamo y una respuesta: REVOLUCIÓN, es decir, relación entre esclavo y esclavista y un solo manager, agente y comisionado: la tiranía…

Según el Nuevo Herald de Miami, el peso completo cubano Odlanier Solís irá a lo que pudiera considerarse “las diez de últimas” cuando enfrente en pelea revancha al gigantón Tony Thompson, que le ganó una decision en la que el cubano cedió porque se quedó sin gasolina y  sin iniciativa.

Lo peor es que el cronista le abre espacio, sospechosamente, a que la derrota se produjo porque “en aquel momento, el boxeador se recuperaba de su ruptura con el preparador Pedro Luis Díaz”, dando la impression de que hubiera sido la pérdida de un ser muy querido, o de un gran amor perdido, la causa de la pésima actuación,

Tal declaración, contaminada porque no es objetiva,  trata de elevar las acciones de un trainer que no es competitivo en el profesionalismo, sino un sonado fracas.

Cuando Solís se lesionó una rodilla practicando otro deporte irresponsablemente, porque un peleador ranqueado, con oportunidad de discutir una faja TIENE QUE CUIDARSE y si no lo hace por cuenta propia será la esquina la culpable de la lesion, porque “no vigiló el diario del ahijado”, pero, si sobre el conocimiento de que existe la lastimadura se ceba al atleta erróneamente para “que gane pegada” en detrimento de la velocidad, descalificando el factor lesión, que puede hacerse crónica, entonces lo mejor que le pudo pasar el habanero fue romper la relación con quien nunca sera un entrenador profesional porque no piensa como tal.

Díaz nunca debió entrenar al cubano, que desperdició la posibilidad de ganarle a Klitschko, porque el ucraniano no tenía la minima confianza en sí mismo, la recuperó cuando Solís cayó y no se levantó, detalle que le restó puntos, porque, una vez que la pelea fue un fracaso, debió hacer intentos por continuar, por encima del dolor tenía que demostrar que era digno de la oportunidad y caer una vez, otra, retorciéndose pero intentando agredir al contrario, detalle que se ha repetido muchísimo en los anales de Fistiana.

Yo no sé si puede ganarle a Thompson en Europa en la venidera revancha, pero, SI QUIERE SEGUIR CON RELATIVO ÉXITO HASTA QUE LA PROVIDENCIA Y LOS PROMOTORES DECIDAN SI VALDRÍA LA PENA OTRA OPORTUNIDAD CHAMPIONABLE, TIENE QUE NOQUEAR, TIENE QUE DEJAR SATISFECHO A UN PÚBLICO AL QUE LE PERMITIÓ DECEPCIONARSE DESPUÉS DE UNA CAMPAÑA PROMOCIONAL MEJOR QUE LA QUE HAN FABRICADO PARA LARA POSIBLEMENTE. AUNQUE LARGUE EL CORAZÓN POR LA BOCA TIENE QUE MATAR AL VETERANO CON RÉCORD DE 39-4-0. LA SALIDA DE DÍAZ DEL RADIO DE ACCIÓN DEL PELEADOR DEBIÓ SER ANTES, TAN INTELIGENTE COMO QUE NUNCA DEBIERON HABÉRSELO PUESTO AL LADO.