Jessie Vargas / Al trono wélter de la O.M.B.

(Foto cortesía: Tom Hogan / Hogan Photos / Golden Boy Promotions)

El sábado 5 de marzo en Washington D.C., Jessie Vargas estaba obligado a la victoria para no irse hasta atrás en la línea por otra oportunidad por el campeonato y su ventaja ante Sadam Ali sin duda fue su experiencia en peleas de impacto, a pesar de que el de Nueva York llegó sin mancha en su currículo de 22 peleas 13 de ellas por la vía de la anestesia y el cinturón wélter de la Organización Mundial de Boxeo (O.M.B.) estaba en su esquina.

En el primer asalto Sadam mostró velocidad preocupando a los fanáticos del residente de Las Vegas quien dijo tener un plan en mente de tomarse su tiempo para poner más contundencia en su pegada al afinar la puntería que fue mostrando conforme avanzaba la contienda. Para la sexta ronda, a pesar de que los comentaristas veían la pelea tablas, Vargas dominaba de ‘ton a son’ insistiendo con el jab y respaldándolo con disparos a quemarropa al rostro y las zonas blandas.

En el octavo asalto Jessie lanzó su ramalazo de diestra que puso en aprietos a Sadam quien tuvo la suerte de ser auxiliado por el referí a quien se le olvidaron las matemáticas y la campana salvo al de la ‘Gran Manzana’ que tenía un ‘ojo de mapache’ y todavía estaba con ‘pajaritos’ a su alrededor.

En el noveno asalto Jessie puso manos a la obra que pintaba cloroformo y logró anotar otro ramalazo que mandó a Sadam a poner un guante en la lona, pero el referí al parecer no miró y dejó continuar la acción que fue peor para Ali que ya no sentía lo duro sino lo tupido y en eso el referí si intervino porque todavía le faltaba bastante al asalto para caducar, pero al final de la noche Jessie mejoró a 27-1 y vuelve a las mieles de ser monarca del mundo. Felicidades Jessie.