NO HAY OTRA FORMA DE CREAR LA EXPECTATIVA ESTIMULANTE

Por Andrés Pascual

Se ha repetido 3 veces, una en mi presencia: durante una conferencia de prensa en un restaurant de Miami, Richard Abril se adelanta hacia Brandon Ríos, que despotricaba con razón por la ausencia de Gamboa sin justificaciones previas (vi el gesto de no presentarse del antillano como una evasión a la pelea) y retó al tipo, entonces se produjo una aparatosa y ridícula movida tipo Cámara Húngara, porque arrastró a Alfredo López, que escribe sobre boxeo e interrumpía cada minuto a Ríos, acusándolo de cobarde. La sangre nunca llega al río donde no hay sangre ni río para que se produzca la confrontación líquida…

Después lo hizo Gamboa, cuando invadió el ring y retó a Mikey Garcia; Lara no desperdició la forma de probar fuerzas con la nueva tónica y retó al Canelo, también en el ring… ¿Resultados? Pleito logrado, tal vez fabricado previamente, que dejan la payasería en tono de “un poco más de sazón…”

La  gente detrás del Canelo no tomaba en consideración al cubano, quizás acogiéndose a la idea que impuso Arum de que “los cubanos no venden por…” y que los propios pugilistas han contribuido a ratificar con algunas demostraciones poco exigentes para quien boxea en el circuito profesional en nivel de campeón, retador o, simplemente, preliminarista de importancia.

Algo que debe reconocer el Hombre-Nuevo castrista, incluso los peleadores antillanos, es que la técnica profesional está adaptada al riesgo; aunque sea  mínimo: hay que arriesgar algo, que la presencia fantasmal del amateurismo no le sirve a quien pelea por dinero, porque la crítica favorecerá siempre al que pelee para el publico. A fin de cuentas, abrumadoramente mayoritario: en el mundo, el fanatismo de los profesionales supera al de los aficionados, que no lo tienen ni como pobres de solemnidad, porque no son dependencias ni propiedades estatales, sino privadas.

Ahora  fue el Canelo, que, siguiendo las regla de de azuzar para llegar a la pelea en el climax del odio regional, acaba de decir que el cubano “ofendió a todos los mexicanos, porque dijo que los peleadores de México era alumnos de la Escuela Cubana…”

Ni Lara, ni los cronistas castristas, ni el publico de la comunidá, fidelista de filosofía, ni el Canelo ni el fanático mexicano, conocen nada sobre la historia de boxeo cubano ni de ningún lado, si no, nunca se atreverían a decir y aceptar semejante estupidez, de ambos lados a veces.

El boxeo mexicano vivió una etapa muy superior al cubano durante los 50’s y logró superar la cantidad de campeones antillanos, porque algunos de sus estrellas, de pluma a bantam, lograron coronarse; mientras que los cubanos se ranqueaban y dominaban sin obtener diademas, con excepción de Gavilán, de ligero hacia arriba, sin llegar a lugares destacados ni en semicompleto ni en heavyweight. Fue a partir de 1960 que se inició el reinado cubano de una década, perdido cuando Casdtro le quitó el oxígeno al profesionalismo y cerró la cantera:

EN 1931, CHOCOLATE; EN 1953, GAVILÁN; EN 1960, PARET, QUE PERDIO, RECUPERÓ Y VOLVIÓ A PERDER; EN 1963,LUIS MANUEL, QUE PERDIÓ 3 MESES DESPUÉS EL TÍTULO; EN 1964, ULTIMINIO; EN 1968, LEGRÁ; EN 1969, MANTEQUILLA, QUE GANÓ, PERDIÓ Y RECUPERÓ LA FAJA. EN 1965, DOUGLAS VAILLANT PERDIÓ POR LA FAJA MUNDIAL LIGERA CONTRA CARLOS ORTIZ, ESE AÑO PERDIÓ JOSÉ STABLE CONTRA EMILE GRIFFITH POR LA FAJA WELTER COMO RETADOR. EN 1962, FLORENTINO HABÍA PERTDIDO CONTRA GENE FULLMER LA OPORTUNIDAD EN UNA CONTROVERSIAL DECISIÓN POR LA CORONA MEDIANA. EN 1968, LUIS MANUEL CAYÓ NOQUEADO COMO RETADOR POR NINO BENVENUTTI POR LA FAJA DE LAS 160 LIBRAS. EN 1973, MONZÓN NOQUEÓ A MANTEQUILLA POR LA FAJA MIDDLEWEIGHT EN SU PODER. HASTA AQUÍ, PARTE DE LO HECHO POR LOS CUBANOS, TENIENDO EN CUENTA QUE WILLIE PEP LE GANÓ A HUMBERTO SIERRA EN MIAMI POR LA FAJA PLUMA Y PASCUALITO A OSCARITO SUÁREZ POR LA MOSCA. Black bill fue eliminado en 1930 por Midget Wolgast, de un round robin BUSCANDO UNA PELEA TITULAR en flyweight.

En 1944, Juan Zurita le ganó por decision la faja a Sammy Angott; comenzando los 50’s, Lauro Salas ganó la pluma; en 1955, Raton Macias la gallo y en 1959 Joe Becerra se la quitó a Alphonse Halimi en ese peso. En 1965 Vicente Zaldívar noqueó a Ultiminio por la corona pluma y Púas Olivares se quedó con la corona bantam en 1968, al año siguiente, Alacrán Torres se convirtió en campeón mundial…

Hasta 1970, México 8 campeones, Cuba 7. Después, la ausencia cubana del circuito desequilibró la confrontación, que ha favorecido a México sobre todo el área, que ha tenido, sin dudas, los mejores y más populares campeones hasta el día de hoy, en que han visto caer drásticamente la producción de super-estrellas al nivel más bajo de su historia.

Veremos estas amenzas estos tejemanejes entre Lara y el Canelo, cómo se van a resolver en el ring. Lara va a un compromiso muy difícil, tanto que no debe ser favorito en ninguna casa de apuestas; pero, hay que esperar, en este deporte, como decía Sullivan, gana quien dure “un round más”.