Gabriel “Tito” Bracero / Con altas y bajas ha tenido éxito en el boxeo
En la cartelera que presentara la compañía Top Rank (el sábado 28 de julio en Kissimmee, Florida, Estados Unidos) estuvieron activos varios púgiles hispanos. Entre ellos vio acción el peso welter Gabriel “Tito” Bracero, quien a sus 37 años de edad y 17 como profesional aún está dando buenas demostraciones. Ese día obtuvo una victoria por nocaut ante el mexicano Artemio Reyes.
Dialogando con el boxeador, éste habló sobre su crianza, la familia, la entrada al boxeo y el desarrollo de la carrera, tanto amateur como profesional.
Aunque nació en Brooklyn, Nueva York se considera puertorriqueño ya que sus padres son oriundos del Barro “Puerto Real” de Cabo Rojo, por tal razón visita la isla con frecuencia.
Reconoce que desde niño tenía un genio fuerte y le gustaba pelear (tanto en el vecindario como en la escuela). Debido a ello su padre lo introdujo al boxeo y cuando tenía 9 años realizó la primera pelea como amateur. En esa etapa celebró alrededor de 100 combates, perdiendo 10 y en dos ocasiones fue campeón de los “Guantes Dorados” de Nueva York.
Aunque su palmarés en el campo profesional es de 25 victorias, 3 derrotas, 1 empate y 6 nocauts, la carrera no ha despuntado como se esperaba. Al inquirir sobre el particular expresó:
“Ha sido por mí, he sido mi propio enemigo. No he sabido separar mi vida personal y el deporte. Además, he tenido periodos de inactividad por uno o más años. He aprendido a la mala y a madurar. Creo que Dios me dio una oportunidad y no pienso en el pasado”.
Sobre la pelea contra el azteca Artemio Reyes indico que, “no me sorprendió el nocaut que le di porque me la paso entrenando. Estuve entrenando con Robert Easter, Jr. (púgil que fue derrotado por Mikey García). Para esa pelea me llamaron una semana antes. Llegué en forma, había peleado en febrero con Thomas LaMana”.
Espera estar combatiendo antes que termine el año y de salir triunfante su manejador estaría haciendo gestiones para que pelee por el campeonato mundial.
Bracero se siente orgulloso de portar la bandera de Puerto Rico cada vez que sube al ring. Al respecto dijo, “Aunque nací en Nueva York mi corazón está en Puerto Rico, mi familia, mi abuelo, mis fanáticos. Ellos son los que me apoyan y tengo que representarlos bien”.