FRAMPTON PASEÓ A NONITO EN LA CASA DEL I.R.A
Por Andrés Pascual
No iba a comentarla, pero, como que la vi, pues voy a decir algo “sazonado” con flashes” del ayer cercano: a Nonito Donaire le pusieron los melocotones a ¼ (las peras Rigondeaux).
En Belfast, Irlanda del Norte, nació y vive el mejor actor de cine de todos los tiempos, Daniel Day Lewis, quien rodara una película cuyo título es El Boxeador y el argumento político-deportivo; pero anoche fue escenario del paseo que le dio por montes intrincados Carl Frampton (25-1, 14 KO’s), al filipino que solían llamar “Flash” hasta que, entre Rigondeaux sobre el ring y Robert García mal asesorándolo desde la esquina, lo dejaron más lento y menos efectivo que uno de aquellos camiones Tatras soviéticos que rodaron durante los 60’s en Cuba.
La pelea “buscaba” el # 1 como retador del peso pluma, versión OMB, evento que se empeñan en llamar “por el título interino” y hasta una faja regalan; extensión si no del megafraude en que han convertido al pugilismo, cuya cabeza es el rosario de organizaciones viciosas que ofrece la decadencia acentuada y progresiva del ayer “noble deporte”.
El caso es que la víctima del zurdo cubano no pudo adivinar a Carl Frampton, que fue más rápido, más eficiente y mucho más efectivo en un tipo de pelea que era costumbre, hasta el “affaire Rigondeaux”, que la ejecutara y dominara él.
Algún dominio de Donaire en el primero, a partir de este, el 11no, cuando se entusiasmó y colocó un par de buenos tortazos en la anatomía del irlandés, que se movió y golpeó como quiso al ex campeón, al extremo de que le provocó una hinchazón molesta alrededor del ojo izquierdo.
La decisión fue unánime, convincente y realista, los tres magistrados votaron 117-111 por el retador mandatorio de Oscar Valdés, flamante campeón que le ganó un peleón a Scott Quigg reciéntemente y a quien creo que Frampton no le podrá ganar.