Floyd Mayweather, ¿ha sido el mejor de su época?
Los generales los conocemos todos. Floyd Mayweather Jr. nació un 24 de febrero de 1977 en Grand Rapids Michigan, Estados Unidos. Hijo de Floyd Mayweather Sr, ex boxeador profesional y sobrino de Roger y Jeff Mayweather quienes también fueron profesionales.
En su carrera como aficionado, Floyd Mayweather Jr. cosechó un récord de (84-6), siendo un prospecto del boxeo desde joven edad. Entre sus logros está el Campeonato Amateur de los Estados Unidos en el año de 1995, fue semi-finalista en los Juegos Olímpicos de Atlanta en 1996 y obtuvo el Campeonato de Guantes de Oro en los años 1993, 1994 y 1996. Sin duda alguna Floyd pintaba ya para grandes cosas en ese entonces.
En el año 96 fue el debut profesional de Floyd, ante el mexicano Ricardo Apocada, celebrado en el Texas Station Casino, Las Vegas, Nevada, combate en el cual Floyd propino un rotundo TKO en el segundo round y así comenzaba el camino a lo que sería su grandiosa carrera en el cuadrilátero.
Pasaron los años y Floyd simplemente fue superando uno a uno sus rivales, muchos al principio no muy sonados en el mundo del boxeo, sin gran nombre y carrera, pero su estilo se iba perfeccionando y se veía un Floyd muy mejorado y trabajado. Un estilo que se le complicaba mucho a cualquiera que retara o que le pusieran en frente a Floyd.
Entradas y salidas efectivas a la hora de conectar y no ser conectado, contragolpeador, efectivo y por sobre todas las cosas, una defensa impecable, quizás lo mejor de su arsenal a la hora de pelear.
En mi opinión, a partir de que enfrentó a Emanuel Augustus, al cual derrotó vía TKO, Floyd demostró que estaba para mejores cosas y que en su momento podría pertenecer a las grandes ligas del boxeo mundial.
Muchos hombres de grandes carreras fueron los que pasaron en frente de Floyd, tales como Diego Corrales, Jesús Chávez, José Luis Castillo, DeMarcus Corley, Arturo Gatti, Zab Judah, Carlos Baldomir, Sharmba Mitchell, quienes fueron dominados, ampliamente en su mayoría, por parte de Mayweather y así ya estaba establecido como uno de los mejores libra por libra a nivel mundial y bien merecido.
Ahora, un nombre del cual estoy seguro muchos van a debatir y seguirán debatiendo por años es el de José Luis Castillo, el mexicano al cual Floyd enfrentó en dos ocasiones el mismo año. La primera pelea fue una muy dura para Floyd, Castillo aplicó mucha presión y logró meter sus manos en la guardia de Mayweather, a lo que también combinó su trabajo al cuerpo y el mantenerlo la mayor cantidad de tiempo posible contra las cuerdas. Fue un combate muy cerrado, en mi opinión, yo lo hubiese dado empate, pero como todos sabemos, el boxeo es un deporte de apreciación y aquella noche del 20 de marzo del 2002, los jueces vieron ganador a Mayweather por decisión unánime.
Tal fue la controversia con este combate que automáticamente la revancha fue hecha el mismo año, y esa fue una pelea en la cual claramente la victoria fue para Floyd, quien logró dominar a Castillo con su estilo contragolpeador, usando el jab y manteniendo la distancia media, entradas y salidas limpias a las cuales Castillo jamás pudo adaptarse y no logró hacer los ajustes necesarios para voltear el combate a su favor.
Volviendo a lo anterior, a partir de que Floyd derrota al argentino Carlos Baldomir, un buen grupo de peleadores de nombre decidieron enfrentar a Floyd y trataron de poner el “1” en la casilla de derrotas de Mayweather, pero fue imposible.
Entre ellos estuvieron Óscar de la Hoya, Ricky Hatton, Juan Manuel Márquez, Shane Mosley, Víctor Ortiz, Miguel Cotto, y más recientemente, Robert Guerrero, Marcos Maidana por partida doble, Andre Berto, Saúl ‘Canelo’ Álvarez y la última esperanza del mundo boxístico, el filipino Manny Pacquiao.
Cada uno de ellos fue dominado por Floyd, ya haya sido a placer o con cierta dificultad, pero aun así, Mayweather siempre encontraba la forma de ajustar y salir con la mano en alto. Con la palabra “dominado” no quiero decir que fue una cátedra de boxeo de principio a fin para todos. Nada de eso. Recordemos que Óscar de la Hoya puso mucha presión a Floyd, al igual que Miguel Cotto y Shane Mosley en el segundo asalto de su combate.
Cuando escribo “dominado”, me refiero a que a pesar de los momentos difíciles que Floyd pasó en estas peleas, logró hacer los ajustes, logró mermar a sus oponentes y tomar cualquier defecto o error que los mismos cometieran y ponerlos a su favor para luego simplemente ejecutar su plan de pelea y dominar en el ring. El que ha visto pelear a Floyd y analiza sus peleas objetivamente, sabe de lo que estoy hablando y tiene que reconocer que es algo impresionante, ya que el factor psicológico es muy importante en cualquier deporte.
Esto sin mencionar en lo que a mí me pareció una verdadera cátedra de boxeo que le dio a Saúl ‘Canelo’ Álvarez y a Manny Pacquiao, siendo este último quien fue llamado por muchos como el elegido para derrotar a Mayweather y tomar su lugar como el mejor libra por libra del mundo y quizás el mejor de su era.
Para muchos, Floyd Mayweather es un arrogante, una persona soberbia, muchos desean verlo derrotado y no solo por un tema de deporte, sino simplemente porque desean verle por el piso, para poder restregarle y decirle en cara o al menos por alguna de las redes sociales, cualquiera de esos sentimientos, comentarios, pensamientos que llevan guardados dentro de sí por mucho tiempo. Para mí es simplemente un tipo tan bueno y muy fuerte de mente, ya que aun sabiendo lo que mencioné antes, él sale cada noche que le toque pelear, hace su trabajo, no defrauda, sorprende y calla millones de bocas a la vez.
No estoy diciendo que Floyd es invencible, para mí nadie lo es ni en el boxeo ni en cualquier deporte, pero sí es un tipo que se ha ganado todo lo que tiene, no le debe nada a nadie y trabaja muy fuerte para obtenerlo. Es un tipo que jamás va a recibir el crédito que merece, y aun así, está totalmente comprometido con su carrera y no defrauda.
Con Floyd Mayweather Jr. es sencilla la cosa: o lo amas o lo odias, no hay de otra. Aún es una incógnita si regresara de su “retiro” momentáneo para mayo del 2016, pero si lo hace, sería interesante verlo en una pelea más. Quizás una revancha contra Miguel Cotto o ‘Canelo’ Álvarez, o enfrentando a las nuevas promesas de la división welter como lo son Keith Thurman, Kell Brook, Amir Khan, Danny García o Shawn Porter. Solo el tiempo nos dirá, mientras esperemos.
Al comienzo de su carrera fue bueno pero ya cuando se convirtió en la gallina de los huevos de oro de los promotores y el CMB hasta ahí llegó porque lo inflaron demasiado y el se trago el cuento que hera el mejor y por eso se volvió cobarde y bocón. saludos