Dos pequeños gigantes se enfrentaran para disipar los fantasmas de la duda de quién es el mejor.
Por Jaime Estrada vidaboxeo@cox.net
El deporte del boxeo sigue dando pasos agigantados en la nueva normalidad, siguiendo al pie de la letra los protocolos de salud en estos tiempos de incertidumbre a causa del Covid-19, y el próximo 13 de marzo en Dallas, se protagonizará una riña donde en cuanto choquen guantes van a saltar chispas por doquier con los títulos supermosca CMB/AMB/The Ring de por medio en lo que se cataloga como una vieja revancha, entre el nica Román González contra el mexicano Juan Francisco Estrada, después de que en el 2012 se vieran las caras por primera vez arriba de una tarima brava, y González quien dice que está en una condición excelente afirma sobre la madurez de su rival a diferencia de la primera pelea que sostuvieron:
“Todo es un ciclo, estamos expuestos a cambios, ambos tenemos más experiencia y se pueden decir muchas cosas pero todo se sabe el mero día de la pelea”.
“El Gallo” orgullo de Puerto Peñasco (tricampeón en diferentes categorías), apenas andaba haciendo sus pininos contra la crema y nata de los pesos chicos y probó su primer derrota por decisión ante González, y es la única espinita que le queda por sacarse del alma, porque en sus 41 victorias (28 anestesias), se añaden tres derrotas, ya disfrutó de lo que le dijo el ganso a la gansa (venganza) ante dos rivales, Runguisai y Juan Carlos Sánchez, así que enfrentar de nuevo a “Chocolatito” es muy especial en lo personal. Ambos son considerados guerreros veteranos a prueba de fuego, y aun siguen en la cúspide de los mejores libra por libra del momento, Román acumula 50-2 (41 por la vía del relámpago) y ha sido monarca en 4 divisiones diferentes (paja, minimosca, mosca y supermosca), también afirma que dependiendo del veredicto que espera sea a su favor ante “El Gallo” le encantaría una trilogía contra el tailandés Rungvisai responsable de sus dos manchas en su currículo profesional, y en exclusiva nos comenta que anímicamente se sintió de lo peor al perder y volver a perder ante el tailandés y pensó en dejar por la paz los guantes, pero la llama de su pasión aun seguía vigente y no la pudo apagar con nada, y como consecuente a pesar de su edad de 33 años a cuestas sigue saliendo con el brazo en alto y dijo:
“Es difícil navegar invicto y de pronto te topas con una muralla que te prohíbe avanzar, pero Dios da la fortaleza de ser perseverante y hacer la mejor decisión en mi carrera preparándome a conciencia”.
Y como “Chocolatito” es una persona muy espiritual siempre le pide a Dios que le vaya bien cada vez que pisa un cuadrilátero y nos comparte que su mentor el finado Alexis Arguello vive en su corazón:
“Manténganse alerta; permanezcan firmes en la fe; sean valientes y fuertes”. 1 Corintios 16:13: