Cinturón Don Adolfo Lopez Mateos para Canelo-Chavez Jr.

El cinturón Adolfo López Mateos que será presentado al ganador de la pelea entre Julio César Chávez Jr. y Saúl “Canelo” Álvarez es sin duda, la más grande obra artística jamás creada en el mundo del boxeo, en mi opinión.

El Consejo Mundial de Boxeo ha creado el Cinturón de Oro, el Cinturón de Plata, el Cinturón de Diamante y el Cinturón Esmeralda; sin embargo, esta faja, creada con más de cuatrocientas horas de trabajo por el artista Huichol Luis de La Cruz, el cinturón más atractivo, más ornamentado, más innovador, que he visto… en el vemos lo mejor del arte indígena, todo en honor a su Dios.

El día de ayer acudimos a la presentación oficial del cinturón en un hangar de Interjet, una empresa 100% mexicana involucrada de lleno con este deporte, la cual promueve la esencia de fuego, pasión, coraje y la voluntad de ganar de todo una nación, llena de gente que persevera y nunca se rinde.

Como diría aquel boxeador mexicano que estaba siendo derrotado y que siguió hasta el fin con la esperanza de conseguir la victoria:
“¡Soy mexicano! ¡Siempre peleamos hasta el final! ”

El creador de esta indudable obra maestra es Huichol, Luis de la Cruz. Un pequeño hombre ataviado con una camisa púrpura y blanca, con un sombrero adornado con plumas de pavo y borlas caídas.

El cierra sus manos limpias y brillantes, mientras espera el inicio de la conferencia, ve su creación con amor y reverencia, y con la paciencia que ha adquirido al ser padre de 7 hijos.

Luis no toma crédito del cinturón, explica que el solo es el mensajero de su divinidad.

Cuando el cinturón apareció por primera vez, se produjo un sonido de asombro muy especial y casi inicia una pelea por el título mundial entre un grupo de fotógrafos y camarógrafos en busca de la mejor toma.

Todo el mundo quería ser fotografiado con el cinturón, sabiendo que pronto será propiedad de Julio César Chávez Jr o de Saúl “Canelo” Álvarez, considerando también su gran valor simbólico.

Más de 40.000 fragmentos de diminutos cristales de color se colocaron cuidadosamente y con precisión en este cinturón. Representa una historia de evolución que involucra al sol, águilas que se elevan hacia el cielo opaco, maíz, cinco espejos, entro otros elementos. La placa en su centro dice 5 de mayo, honrando y conmemorando la Batalla de Puebla. El cinturón también reconoce al ex presidente de México, Adolfo Mateos, quien fuera instrumental en la creación y fundación del Consejo Mundial de Boxeo en 1963.

Don Adolfo no vivió lo suficiente para ver cómo el WBC ha florecido y crecido, extendiendo su alcance y envergadura en 166 naciones. Sin embargo, su nieta, Juliana Sola, será la encargada entregar este cinturón especial al ganador de la pelea durante una ceremonia especial en México.
Los gorriones vuelan arriba de nosotros y se posan en una viga, mirando el enorme pero delgado avión de Interjet. Parece como si evaluaran el diseño aerodinámico de la nave.

Creo que el día hoy atestiguamos algo supremo, algo único en su clase ¡Nunca habrá otro como él!

Como un agradecimiento humilde y sincero al genio detrás de esta obra de arte, el WBC proporcionará a la comunidad un gimnasio de boxeo, cancha de baloncesto y otras instalaciones deportivas, NO como caridad, sino como un agradecimiento a la grandeza y generosidad de toda la cultura Huichol al compartir este magnífico regalo con nosotros.

Este cinturón es una perla invaluable. Quienquiera que lo gane lo estará sosteniendo aún más allá del alcance de sus brazos. Es de este mundo, pero simultáneamente está fuera de él.

“El sol brillaba y la luna lloraba, mientras algunos jugaban y otros dormían. En los abundan las estrellas. Algunos sonrieron y otros fruncieron el ceño. Y todo el tiempo, nuestro pequeño mundo gira y gira, girando lentamente sin un sonido”.