BERNARD HOPKINS SE QUEJA MUCHO Y PELEA POCO
Bernard Hopkins, ex ejecutor y ahora extraterrestre, está a dos meses de cumplir 50 años, edad en que la gran mayoría de atletas profesionales ya son abuelos. Hopkins ha hecho muchas cosas como múltiple campeón mundial que han sido admirables y únicas. Como campeón medio defendió su título en 20 ocasiones, más que ningún otro titular en este peso. Ha sido campeón supermedio y semicompleto. Ha sorprendido a todo mundo venciendo a rivales de la clase de Félix Trinidad, Oscar de la Hoya, Kelly Pavlik y Antonio Tarver. Ha ganado muchos combates importantes, pero lo que nunca ha ganado es el cariño del público y de la prensa y esto le duele mucho.
Mientras que su indumentaria cuando era “The Executioner” era atractiva y hasta original, la máscara verde que ahora se pone al subir al ring tilda en lo ridículo y le da porte de bufón, a quien nadie toma en serio. Ahora dice sentirse ignorado por los medios de comunicación por ser negro y que si sus logros en el ring no han sido más comentados y aplaudidos es por su raza negra. Pero, ¿quién va a tomar en serio a un boxeador que sube al ring con una máscara de Halloween?
Dice el discutido matusalén del pugilismo que si el no fuera afro-americano su faz estaría en todos los anuncios espectaculares, en todos los cartones de leche y en todos los lugares.El que la prensa y el público no se vuelquen sobre Hopkins tiene mucho que ver con su nulo y aburrido estilo de pelear. Sigue ganando, pero sus combates son soporíferos. Nunca expone su físico y gana mayormente porque es una “chucha cuerera” a la defensiva.
Seguido me he equivocado cuando he seleccionado a un rival de Hopkins como el ganador, así que contemplo con cuidado su próxima pelea en Atlantic City ante el recio ruso Sergey Kovalev, a quien se enfrentará este sábado en un combate por la unificación de los títulos de las 175 libras. Kovalev es un espigado púgil con poder explosivo en sus nudillos (25-0-1, 23 KOs). El ruso es joven y dice que tratará a Hopkins como un púgil de su edad. Kovalev piensa presionarlo y forzarlo a pelear pensando que el tren de pelea que el ruso impondrá será demasiado para un púgil de la edad de Hopkins.
El “extraterrestre” ofrece muy poco como boxeador para que se apasionen las multitudes. Tira uno o dos golpes y abraza a su oponente. Kovalev debe hacer todo lo posible para darle una tunda y retirarlo como peleador para que le de paso a los púgiles que brindan emociones como Kovalev, Gennady Golovkin y Adonis Stevenson, porque de esto se trata el boxeo
¿Piensas igual? ¿Encuentras a Hopkins aburrido y esperas que Kovalev lo lleve al retiro? Déjanos saber tu opinión abajo.
Quisiera saber que tiene Al Haymon que no tengan Oscar de la Hoya y Bob Arum. Ahora parece que todo mundo con guantes de box está firmando contratos con el misterioso Haymon. El último púgil en hacerlo es el despistado Julito Chávez, que últimamente habla más que pelea. Julito ha dejado a Arum diciendo que ya se expiró el contrato entre ellos, pero Arum dice que el mexicano le debe un combate y está dispuesto a exigirle que cumpla porque ya ha iniciado un litigio contra el sonorense y Haymon. Julito se ha vuelto puro cuento y no parece hijo de la leyenda, que si bien tuvo sus problemas fuera del ring, siempre peleó más en el encordados que fuera de ellos☺
Ultima mente el boxeo tiene unos protagonistas que hablan mas delo que pelean es por eso que este deporte ha perdido un gran protagonismo en muchos aficionados amantes del deporte dalas narices chatas.