Alexis Arguello se tituló campeón pluma AMB noqueando sorpresivamente al “Púas” Olivares
Hace 46 años en el Fórum de Inglewood
En una pelea en la que el fantástico Púas Olivares dominaba casi a placer, el nicaragüense Alexis Arguello volteo la pelea con un sorpresivo nocaut en el round 13. De esta forma el pegador pinolero alcanzó el primero de los tres títulos mundiales que coronaría en su brillante carrera. El combate tardó en momento de la pelea Olivares exhibía el impresionante record de 76 peleas ganadas, 69 de ellas por Ko y 1 empate; Arguello por su parte presentaba una trayectoria de 41 triunfo, 36 por Ko. y 3 derrotas.
La pelea se efectuaba en el fabuloso Fórum de Inglewood en la ciudad de Los Ángeles, en este escenario la idolatría la acaparaban dos leyendas del boxeo: Rubén Olivares y Mantequilla Nápoles. El Púas venía de ser un brillante Monarca de la división Gallos, de hecho se le considera el más grande de la historia. Por problemas con el peso subió a la división Pluma donde aprovecho el retiro del panameño Ernesto “Ñato” Marcel para adjudicarse el título vacante noqueando al japonés Zensuke Utagawa. De modo que Olivares efectuaba la primera defensa de ese título Pluma ante el peligroso nicaragüense.
Arguello venia de fallar en un intento por coronarse Campeón Pluma de la AMB al ser derrotado, a comienzo de ese mismo año 1974, por el entonces Campeón Ernesto Marcel en Panamá. Pero entre sus víctimas, se contaban hombres como el canadiense Artur Haffey – noqueador de Olivares – y el cubano-español José Legra ex campeón Mundial Pluma del CMB. De modo que Arguello era un retador temible. Ya Olivares había expresado con desenfado que no deseaba enfrentarlo porque “es demasiado alto y mi compadre, el “famoso” Gómez me dijo que pega fuerte”. Las negociaciones para el arreglo del combate habían sido difíciles debido a las precauciones de Olivares y a las exigencias económicas de Arguello.
La Pelea
En medio de una expectativa fantasmal, en un Fórum copado de mexicanos, sonó la campana para el primer round. Todos contenían la respiración. Olivares daba saltitos y se desplazaba alrededor de Arguello ejecutando leves movimientos de cintura. Arguello, alto y sereno alzaba su guardia y le seguía con la mirada. Olivares se llevó este primer round con un boxeo alegre y una rápida derecha que conecto al rostro de Arguello en el centro del ring. Los rounds 2 y 3 fueron para el retador que logro alcanzar al Monarca con fuerte Jabs de izquierda y directo de derecha al rostro del campeón. Del 4to. en adelante Olivares ejerció dominio con su velocidad de pierna y su habilidad de entrar y salir pegando. Arguello respondía valientemente pero la clase y la veteranía del Campeón parecían superarlos.
Los rounds mejoraron en intensidad y ambos peleadores exhibieron sus mejores artes. Olivares, con ataques selectivos, entrando y saliendo aunque sin desbocarse para evitar la peligrosa pegada de Arguello. El nicaragüense se veía confundido aunque ensayaba mortíferos ganchos tratando de definir la pelea por la vía violenta. El público aupaba a su ídolo y empezaba a olfatear que ya entraba en dominio de la pelea. Los intercambios de golpes aumentaban y Olivares asumía grandes riesgos. Arguello trataba de responder pero el mexicano se crecía en cada lance. “México, México, México…” deliraba la afición al ver al Púas ejercer dominio en la pelea. Pero había un temor oculto detrás de esos vítores. No se puede arriesgar tanto porque el nicaragüense es un pegador temible
Los temores se hicieron realidad.
En el round 12 Olivares lucía desbordado mientras que Arguello se veía cansado e impotente ante la ofensiva del Púa. No se veía al mexicano con una pegada tan potente como la que había exhibido mientras fue Monarca en los Gallos; de haber sido así, difícilmente Arguello hubiera podido llegar de pié a estas alturas del combate. Pero el nica había aguantado todo y estaba firme dando la batalla. Salieron para el round 13 con un Olivares dominador y un Arguello urgido de reaccionar a ver si le daba un vuelco a la pelea. Apenas empezó el round 13 se produjo una acción y Olivares se fue violentamente a la lona producto de un potente gancho de izquierda de Arguello. Fue demasiado rápido. A la afición se le heló la sangre.
Olivares se puso de rodilla e hizo un esfuerzo por incorporarse. El réferi Dick Young contaba parsimoniosamente una vez de pie, el mexicano tomó la temeraria decisión de lanzarse a un ataque suicida en lugar de evitar el cambio de golpe desplazándose o buscando el clinch, pero no pudo contener sus impulsos y su casta de guerrero lo llevó a un intercambio fatal. Un Uper de Arguello a la mandíbula de Olivares lo derribo definitivamente pese a que la mayoría veíamos ganando a Olivares, los jueces llevaban la siguiente puntuación: el réferi Dick Young la tenía 8-4 a favor de Arguello, mientras que los jueces Larri Rozzadilla 6-5 y un round empate a favor de Arguello también y finalmente George Latka la llevaba igualada 5-5 y un empate. Todavía nos sigue sorprendiendo esa votación. De esta memorable pelea se han cumplido ya, 46 años.