Es Poco Lo Que Puede Hacer Roberto García Por Julito Chávez

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He jugado basquetbol recreacional toda mi vida de adolescente y adulto. Soy un guardia tirador y aunque de vez en cuando entro a la pintura a tratar de bajar un rebote, siempre regreso a lo mismo. Este ha sido mi estilo de juego toda mi vida y ha resultado muy difícil cambiar. Esto es lo que le pasa a los boxeadores. Si comienzan su carrera como fajadores o son boxeadores, así van a terminar hasta que se retiren.

Muhammad Ali y Larry Holmes no sabían pelear si no usaban su jab. El jab era parte integral de Holmes, porque hasta llegó a noquear con esta arma. Un fuerte jab tipo misil noqueo a Ossie Ocasio. Asimismo, Meldrick Taylor sabía que su mejor oportunidad para ganar era boxear a base de su excelente movilidad de pies y velocidad de manos. En su primer combate ante Julio César Chávez, Taylor llevaba la pelea ganada hasta los últimos segundos del último round, pero en lugar de salirse de la zona de peligro por piernas, decidió intercambiar golpes y fue noqueado dramáticamente. En el combate de revancha, Taylor volvió a dominar a Julio César en los primeros 6 asaltos. La esquina de Taylor le gritaba que siguiera boxeando, pero a Taylor siempre le dio por fajarse. Cuando empezó a intercambiar metralla con Julio César, este volvió a noquearlo. Es muy difícil cambiar de estilo.

Julio César padre casi nunca utilizó el jab en su brillante carrera. Subía al ring y buscaba el choque con sus rivales sin necesidad de prepararlos con el jab. Su hijo, Julito Chávez, sube al ring a tratar de hacer lo mismo, pero no tiene ni la pegada ni la calidad de su padre. Su nuevo entrenador Roberto García está tratando de modificar el estilo del junior urgiéndole que agregue el jab a su arsenal ofensivo. Sin embargo, nos dimos cuenta que resulta muy difícil enseñarle trucos nuevos a un boxeador que ya adoptado cierto estilo. Fueron mínimos los jabs que lanzó Julio en su combate ante en El Paso. Los que tiró fueron más bien conatos de jabs, porque nunca fueron lanzados con convicción.

Roberto dice que aunque su trabajo con Julito no estuvo en manifiesto en su combate ante Marcos Reyes, habrán de pasar dos o tres combates más para que se note el cambio en el púgil azteca. No creo que García pueda cambiar el estilo de Julito para que use su jab como parte de su arsenal ofensivo. Lo que si puede hacer por el peleador de Culiacán, Sinaloa es meterle disciplina en el gimnasio y ponerlo en mejores condiciones físicas. Critican mucho a Julito porque no puede marcar el peso, pero la verdad es que este es un púgil que sigue embarneciendo. Lo vi marcar 160 libras para su combate ante Andy Lee hace un par de años, y la verdad es que parecía una momia al subir a la báscula. El joven  de 29 años es alto, ancho de espaldas y se me hace muy grande aun para 168 libras. Julito Chávez es un peso semicompleto, pero no me lo imagino peleando ante los Kovalevs o los Stevensons del boxeo. Los mexicanos aún no tenemos la estructura anatómica para ser 176 lbs. ni mucho menos pesos completos.

Julito debe hacer unos dos o tres combates más en las 168 libras- sacrificándose-, guardar su dinero y decirle adiós al box. No le queda otra. Creo yo que el púgil sinaloense sí le hace la lucha para marcar el peso estipulado, pero no puede. Fernando Vargas tuvo que retirarse muy joven, simplemente porque ya cerca de los 30 años ya no podía dar el peso. El me lo dijo