Contra lluvia, rayos y centellas Jesús Gutiérrez se impuso en pelea con título de por medio
Que ironía de la vida, en Las Vegas no hay mucha lluvia y cuando llega quiere hacer de aguas un evento de boxeo local, que se estaba esperando con mucha ansia por parte de los aficionados.
En el patio del Sunset Station todo parecía ir sobre ruedas y como a eso de las siete y fracción Mayra Alonso canto los himnos tradicionales de México y Estados Unidos, pero antes de que se tirara la primera guantada se puso pausa a los combates porque la lluviecita seguía menudita.
A eso de la media hora se reanudo el zafarrancho y el cielo seguía mandando sustitos con más agüita esparcida, acompañada de relámpagos y estruendos., con dos chicas de pancarta cargando cada número a la vez.
En algunas maquinitas tragamonedas estaba la imagen de Jesús Gutiérrez quien tuvo la pelea de su vida ante Rashad Ganaway por el título ligero CMB-EUNBC o algo así por el estilo, y me hubiera gustado una credencial como la de los promotores para recuerdo, pero me tuve que conformar como todos los miembros de prensa con un brazalete.
3 peleas se consumaron de las 6 programadas y otro relámpago con estruendo presagiaba que la pelea que mas interesaba se pospondría.
Cuando la semi estelar se termino cuando el referí intervino porque ante sus ojos Mc Faden no estaba en condiciones de seguir ante Wes Capper y se volvió a poner manta de protección en la lona, previo al combate que mas interesaba y llego “El Huracán de Culiacán” con la Banda Tierra Sagrada y el Moreno Carrillo abriéndole cancha en su camino a la tarima brava.
La esquina de “El Uno” pronosticaban que su pupilo mandaría a Chuy con el Dios Morfeo y la gente de este sentían en carne viva lo contrario, y empezó la lloviznita y nadie dijo ni pio, pero al final del asalto si se subieron varios a limpiar la lona.
La pelea se tornaba en un juego de ajedrez, con Rashad poniendo en evidencia su rapidez de pies y manos, pero Gutiérrez que se cree un monstruo al subir al ring le empezó a poner mano dura y Ganaway puso un cambio más a su velocidad y aparte encontró el método de amarrar para no quedar presa de las guantadas intrépidas de Jesús que le de decía que le iban a doler los golpes. Otra vez empezar la lluvia y apenas iba el tercer asalto en pelea de 8 rondas, y si que la lona se ponía resbaladiza y hasta Jesús resbalo en un combate extremadamente paralelo.
Los asaltos cruciales que fueron el séptimo y el octavo, Gutiérrez ya no tuvo recato para lanzar granadas de todo calibre a la humanidad de Rashad que en vez de entrarle al toro por los cuernos decidió seguir en su bicicleta, tratando de amarrar y dar golpes con el codo, y todavía se quejaba de que le estaban pegando en la nuca, lo bueno es que el referí no se fue con la finta y aunque si le reclamo por detener, usar el antebrazo y golpeo mas debajo de la tolerancia no le quito ni un punto a Ganaway que escucho como música celestial el empate que dicto uno de los jueces con 76 a 76, pero los otros dos se inclinaron por el nuevo campeón ligero WBC-USABC ¡Jesús “El Huracán de Culiacán…. Gutiérrez!!!!! ¡Y Si Se Pudo!