Colombia / Resultados desde Cascajal
Con la presencia de aficionados de la Liga de Bolívar, se dio inicio en el corregimiento de Cascajal, comprensión municipal de Magangué, a la cartelera mixta entregada por la alcaldía en dúo con la promotora Tafur Promotions.
La plaza principal estuvo copada de público observando inicialmente a los diez púgiles bolivarenses que les faltó entrega para un digno espectáculo boxístico.
Un grupo de bailarines combinando sus movimientos con acrobacia y contorcionismo le dieron color a la calurosa noche.
Las disputas profesionales comenzaron con el nocaut en el primer asalto de Dagoberto Orozco (2-0, 2 Ko´s) a Neder Quintana, en peso pesado.
En las 118 libras Jonathan Burgos (6-2-1, 4 KO´s), del municipio de Los Córdobas; superó a Jonathan Morelos (0-4-0), de Moñitos, Córdoba, por abandono en la segunda ronda.
En 154 libras el magangueleño Orlando Estrada (9-6-1, 8 Ko´s), noqueó en la ronda dos a un complicado rival como fue Álvaro ´El Abogado´ Vargas, quien suma su octava derrota en igual número de pugnas. El profesional del derecho fue a parar a la lona de un golpe a la zona blanda.
Logró reponerse entregando pelea con más corazón que técnica. Un rápido gancho de derecha explotó en la nariz quedando tendido en el tapete. El médico de la jornada, Enrique Daza López, subió al ring a la atención del profesional del derecho que estaba sentado en la alfombra, detectando fractura de tabique.
El clasificado mundial Walberto Ramos (22-6-2, 15 Ko´s), en las 122 le ganó al veterano Felipe ´La Avispa´ Almanza (20-32-4, 10 KO´s), en el capítulo dos. El veterano combatiente que tuvo altibajos en Estados Unidos, de un puño en el abdomen no dio más competencia estando varios minutos en el tapete. El tercer hombre dentro del cuadrilátero decretó fin a la riña.
El evento se cerró con el fácil nocaut del anfitrión Luis Hernán Rodríguez (6-4-1, 4 Ko´s), a Rufino Valdés (1-7-0, 1 Ko´s), en el asalto uno. Mostrando su superioridad de principio a fin mandó a limpiar la tela, en la segunda caída salió del entarimado por la potencia de los puños contrarios.
Fueron supervisados por el Presidente de la Federación Colombiana de Boxeo. El árbitro fue el colegiado Manuel Arroyo.