Golden Boy Promotions: Antes del gran colapso?
By: RDiazBoxing
Traducción Reynaldo Sánchez.
Hay un montón de viejos dichos que se enroscan alrededor de la idea de que no importa qué tan grandes y altas las cosas pueden llegar a ser, casi todo tiene un reloj y una fecha de caducidad. Hay abundantes metáforas y símiles que retratan imágenes similares a aquellos adagios. “Todo lo que sube, tiene que bajar” Algunos más científico y objetivo que otros, algunos contundente y al punto – pero, no obstante, que lleva el mismo mensaje. A veces la escritura está en la pared y es un sobrio recordatorio de que aunque el sol puede salir y brillar, la noche también lo sustituye por su oscuridad. O mejor aún, como el “padre de la literatura Inglés” Geoffrey Chaucer dijo en pocas palabras: “todas las cosas buenas deben llegar a su fin”
En 2002, cuando Oscar De La Hoya se aventuró a salir para formar su propia compañía de promoción de boxeo, tuvo socios instrumentales y ayuda como la de un ex banquero suizo en Richard Schaefer, y un abogado con el nombre de Stephen Espinoza. A continuación, Golden Boy Promotions se formó, y De La Hoya fundó una entidad de promoción en la que juró que haría todo lo posible para “limpiar el deporte del boxeo” y alejarse de todas y cada una de las fechoría que había plagado este deporte en el ámbito de las relaciones entre promotor-boxeador por cuestión de décadas .
Vamos a avanzar muy rápido doce años hasta el tiempo presente y analizar lo que Golden Boy Promotions ha logrado desde que abrió sus puertas. Para empezar, la empresa ha pasado a convertirse en uno de las dos principales empresas promotoras de primer nivel en el deporte del boxeo. Ellos han creado a un formidable (recientemente ex), campeón del mundo como Abner Mares; y albergaron una gran estabilidad de campeones, ex campeones, prospectos y muchos noveles combatientes bajo su bandera promocional. También han establecido numerosos récords en términos de Pay -Per -View y la venta de entradas tanto para el crédito del cliente Floyd Mayweather, y más recientemente, Saúl “Canelo” Álvarez. Golden Boy Promotions ha logrado mucho éxito desde su puesta en marcha año y de eso no existe duda. Luego a finales de 2011, el ex abogado del GBP inicial co – fundador y el plomo en la casa legal ( Espinoza ) optó por dirigirse a Showtime para comandar la nave de su departamento de deportes al convertirse en el vicepresidente ejecutivo de allí. Poco después, HBO dejó en claro que ya no estarían trabajando con Golden Boy Promotions, manifestando numerosas razones en cuanto a su decisión (creando así la que con frecuencia se hace referencia como “la guerra fría” entre las redes rivales, y el promotor de Top Rank, su rival) . Desde entonces, Showtime y Golden Boy Promotions han llegado a organizar un gran número de emocionantes espectáculos y combates tanto en la plataforma básica de Showtime, así como a través de Pay -Per -View.
Sin embargo, el éxito que Golden Boy Promotions ha tenido en Showtime como empresa, no han venido sin su parte justa de la prensa y los reveses negativos. Las situaciones y acontecimientos que mancharon la credibilidad y la imagen de la compañía incluyen numerosas travesuras con la cocaína ligada al fundador de la empresa de Oscar De La Hoya, que produjo visitas a múltiples centros de rehabilitación para el ex campeón del mundo en algunas temporadas. Esas historias de rehabilitación en los titulares nacionales a fines del año pasado, y ya no ver a Oscar en la pantalla de la televisión, sentado en primera fila – animando a su establo de boxeadores.
Todo eso cambió hace aproximadamente un mes, el sábado 8 de marzo momentos después de que el nuevo billete de oro de GBP, Saúl “Canelo” Álvarez , había noqueado Alfredo Angulo después de diez rondas – Oscar De La Hoya estaba en el edificio. Para sorpresa de muchos, Oscar estaba en el interior del anillo, al parecer dispuesto a aparecer para hacer lo que había sido conocido por hacer antes – que era mostrar el apoyo a sus combatientes y ser parte de toda la prueba post- victoria. Aunque el miembro más sorprendido de la audiencia tenía que haber sido el CEO GBP, Richard Schaefer, cómo Oscar voló en la noche del combate, y muy probablemente no envió a Schaefer el memo.
Casi momentos después de la victoria de Canelo sobre Angulo, la rumorología en el boxeo estaba repentinamente bien viva, y produciendo escenarios asombrosos, que todo parecía ser un círculo alrededor de Golden Boy Promotions. WarBoxing.com llegó hasta el reconocido empresario de boxeo profesional y machtmaker, Rick Glaser, quien ha trabajado con nombres como Don King y varios otros en el negocio. Cuando se le preguntó en cuanto a qué es exactamente lo que entendía que estaba pasando en GBP, Rick declaró: “Richard y Oscar han tenido un gran pelea. Oscar y sus accionistas están viendo que Richard Schaefer es perjudicial para su negocio y la empresa. Es un poco de todo ( en cuanto a lo que está pasando y se está desarrollando ) .. Pero que ha estado ocurriendo durante mucho tiempo y eso sólo alcanza su punto de ebullición. Oscar está en rehabilitación y sus accionistas abrireron los ojos en cuanto a las cosas, han abierto los ojos en cuanto a lo que está pasando y lo que ha estado haciendo Schaefer. “Cuando le pregunté a Rick por qué estaba tan seguro de su opinión sobre el asunto, él simplemente dijo que él no tiene vínculos directos a ninguna de las partes involucradas y se siente que los fanáticos del boxeo se merecen más de lo que han estado recibiendo. “Esto afecta a todo el mundo. Es una cosa rara. Pero afecta a los fans, los boxeadores y todos los involucrados. “Cuando se le preguntó que prevalecerá en todo esto, Glaser cree que Oscar trabajará con Arum y HBO de nuevo, y a pesar, que la “Guerra Fría” va a terminar, una nueva puede sobrevenir a través de Schaefer y Haymon y los que no quieren trabajar con otros promotores en el futuro. Le pregunté a Rick lo que pensaba de Schaefer y Al Haymon en la mezcla de todo esto y estas fueron las palabras elegidas por el Sr. Glaser: “Schaefer utilizó el dinero de Golden Boy Promotions para construir lo de Haymon. Haymon es definitivamente un problema para el deporte y no es bueno para el boxeo. Convirtió Golden Boy Promotions en su propia casa de putas”
La raíz de la cuestión aquí, parece principalmente por centrarse en el hecho de que los accionistas, los que están más cerca de Oscar, empezaron a hacer preguntas. Con apoyos de mucho dinero, es decir, AEG, una entidad que cotiza en la bolsa que es dueño de equipos de deportes profesionales, el Staples Center, StubHub Center, y muchas más propiedades y empresas en todo el país, es seguro decir que el reloj seguía corriendo en esas preguntas sin respuesta. Los rumores se han vuelto más gruesos, y como vamos a publicar, que está siendo rumoreado que De La Hoya y Schaefer han contratado cada uno abogados externos, pero Stephen Espinoza ha declarado una tregua entre todas las partes involucradas hasta después de la cartelera Mayweather- Maidana que tomara lugar el 3 de mayo, y es promovida por Golden Boy Promotions.
A partir de entonces, las implicaciones y consecuencias que se desarrollarán después de la pelea Mayweather- Maidana son enormes, y pueden cambiar por sí solo el paisaje del modelo de negocio del boxeo actual y su estructura, ya que por lo que sabemos.
Sin embargo, esto no debería del todo ser una sorpresa para nadie, si alguno de lo anterior ira hacia abajo, lo que terminaría en desagradable y brutales litigios legales. Uno tiene que pensar de manera crítica y tener en cuenta a los jugadores que están en este esquema de las cosas. Schaefer es un graduado de negocios que era el hijo de un banquero suizo exitoso, y fue un banquero suizo exitoso y parte de la regla de oro en la banca suiza es la práctica del secreto y la privacidad), a sí mismo, antes de que Oscar le tendiera la mano y le solicitara a Richard su ayuda para construir su empresa. Eso fue en 2002. Para el año 2012, GBP y Schaefer acordaron unirse contractualmente como los directores generales por un “largo plazo” en un acuerdo no revelado para continuar ejecutando el programa en su papel de director general y mantener un ojo vigilante sobre las operaciones del día a día de la empresa. El comodín en esta ecuación es, por supuesto, el asesor de gran alcance y manager, Al Haymon, quién está legalmente contratado para Golden Boy Promotions, y quien no lo es. Eso por sí solo puede presentar una larga batalla judicial, y potencialmente dejar un montón de boxeadores en el limbo, y en el peor caso: a un lado o inactivo hasta que se hayan hecho resoluciones.
Por último, permítanme dejarles con esto. De La Hoya dijo hace años sobre Schaefer: “Cada día, parece que lo mejor está entre nosotros. El negocio, nuestra amistad, la confianza. Tengo estas visiones y Richard las convierte en realidad. Si le cuento acerca de un problema, piensa durante cinco segundos y tiene una solución. Él siempre me mantiene informado. Trabaja en los escenarios y luego los trae a mí para tomar una decisión. Nunca hemos tenido una discusión. El equipo que tiene en su cerebro es increíble. Somos un equipo perfecto”
A pesar de que sin duda se presentaron como el equipo perfecto durante años, ahora parece que la nave que fue un éxito de Golden Boy Promotions con Schaefer y De La Hoya a la cabeza, ha navegado. Y deben estas acusaciones y rumores sostener cualquier pedazo de la verdad, estamos posiblemente por ver un gran cambio.
Las amistades y los negocios nunca han tenido un buen porcentaje de éxito, y la relación personal y profesional entre Schaefer y De La Hoya buscará añadir al hecho de una vez que esta lucha ha llegado a una conclusión. No fue Schaefer el culpable detrás de las consecuencias? ¿Tiene Oscar que ver a Schaefer como un traidor de conveniencia que utilizó su empresa en contra de él con el fin de forjar una alianza con Haymon? Las preguntas se mantendrán y sin embargo permanecerán sin respuesta por lo menos hasta después del 3 de mayo. Pero está claro que el daño ya está hecho y hay que tener en cuenta las posibilidades y las consecuencias que seguirían a raíz de todo. En el ínterin, sin embargo, vamos a reflexionar sobre algo.
La regla de oro: uno debe tratar a los demás como uno podría tratarse uno mismo.
Y en la capacidad de los negocios y la amistad, esta es una regla que es aún más difícil de honrar y defender. Por desgracia en la vida, llegamos a un acuerdo con el hecho de que se hicieron las reglas para romperlas. Ya sean de Oro o no.
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