El hijo de la leyenda se enfrentará ante el argentino Nicolás Luques Palacios este Sabado

Para Omar Chávez su combate del próximo sábado en esta ciudad tiene dos claros objetivos: demostrar que tiene las herramientas para alcanzar la cima del boxeo y que a partir de este encuentro su carrera tomará un rumbo diferente y positivo.

Chávez y el argentino Nicolás Luques Palacios se vieron las caras este día en una conferencia en la que ambos pronosticaron salir con la victoria, encabezando una función que se realizará en el Polideportivo Juan S. Millán de la capital sinaloense y que será transmitida por Azteca 7, la Casa del Boxeo en México.

“Se llegó la hora de demostrar a la afición de lo que estoy hecho, de demostrarle y agradecerle a mi padre aquí presente que las oportunidades son para aprovecharse y que no voy a fallar. Siempre que he peleado en Culiacán he salido con la victoria y esta vez no será la excepción”.

Omar (36-5-1, 24 Ko´s) dijo que se preparó muy bien, consciente de la gran responsabilidad que tiene ante su público, pero sobre todo, a su progenitor quien ante la misma prensa había sentenciado días atrás que si no hacía una buena pelea, y si no tiraba golpes, que mejor se dedicara a otra cosa.

“No sabía que Luques pertenecía al mismo equipo de José Carlos Paz. Eso quiere decir que la cosa no está para nada fácil”, indicó el sinaloense en alusión a su última pelea que perdió precisamente con Paz en Durango. “Pero no importa, estoy listo mentalmente y físicamente. Vamos a echarle todas las ganas y dejar todo arriba del ring”.

Luques (10-5-0) agradeció a la empresa Zanfer darle una segunda oportunidad de pelear en México, y reconoció que cuando le ofrecieron este duelo con el hijo de la leyenda mexicana sabía que no la podía desaprovechar, por todo lo que representa el apellido Chávez.

“Me preparé mejor que con Alvarez, porque vengo a la tierra de mi rival y porque representa una gran oportunidad en mi carrera. Yo y todo mi equipo venimos con mentalidad ganadora, pero sobre todo, a ofrecer un gran combate”, dijo el argentino nativo de Cordoba.

En la función participarán otros grandes prospectos del boxeo mexicano como Pedro Campa quien se medirá al venezolano Adrián “Morochito” Pérez, así como Sulema Urbina y marcará el debut de Karen Rubio, esposa del hermano menor de Julio César Chávez quien ganó medalla de Oro en la Olimpiada Nacional hace dos años.

“Vengo a México por dos opciones: o me sacan en camilla del cuadrilátero, o bajo con la mano en todo lo alto”, dijo Pérez. “Sé que voy contra un rival muy difícil, muy fuerte, pero confío en mi preparación”.

Campa dijo estar contento de pelear profesionalmente en Culiacán. Recuerda que aquí sostuvo algunas batallas en el amateur y eso le trae buenos recuerdos. “Estoy cerca de pelear por un título del mundo y Pérez no será un obstáculo para dar otro paso más hacia esa contienda”, indicó.