BERTO NOQUEA A ORTIZ, QUE DEBE IRSE YA
Por Andrés Pascual
El bueno de Óscar estuvo por Miami comprando corazones y tratando de vender una pelea que al cubano le importa un pito; fabricó un castillo de virtudes en la división pesada con alabanzas a Ortiz: “esperanza de la división con pegada de mastodonte y velocidad de colibrí…”; no olvidó a Lara, al que considera “de lo mejor que he visto”, pero le vio perder cerradamente contra el peleador que le tumbó a Tutico Zavala, porque, entre la escasez de dinero y de herramientas de pícaro obligado para este oficio del boricua, más la protección exagerada del californiano por lo del “sueño”, ni ha pasado ni pasará nada que ventile como Dios manda la flagrante actitud delictiva que asumieron ambos, Óscar y el Canelo, cuando el boxeador dejó a la deriva un contrato, perfectamente legal con All Stars, sin mirar atrás…
Una curiosidad: he leído muchas veces a los cronistas referirse a Oscar de La Hoya como “boxeador legendario”, sin embargo, el Herald inauguró la leyenda promotoril del ex-campeón durante el tour para Canelo-Kahn: “legendario promotor”, no voy a poner más, estoy cansado de ripostar tanta falta de profesionalismo de esa plana, les dejo el “toma y daca” de mutua adulonería”:
http://www.elnuevoherald.com/deportes/boxeo/article74694182.html
La cartelera de ayer en Carson fue movida; a pesar de la casi absoluta ausencia de la técnica boxística, hubo nocaos, a fin de cuentas, lo que el público pide siempre para certificar ORO lo mismo a un boxeador que a un programa: “o lo tomas o lo dejas, no hay más na’”.
André Berto (31-4, 24 KO’s) tomó desquite, por aplicación de cloroformo al 1:14 del 4to round, de la derrota por decisión que le costó la faja mundial welter contra Víctor Ortiz (31-6-2, 24 KO’s) en Connecticut en el 2011; víctimas de May jr ambos en peleas que, si el Niño no regresara, quedarán como parte de significativo y obligado recuento en la carrera del sobrino de Roger.
Contra Ortiz porque se produjo el nocao después del golpe irresponsable y adrede que cortó a Floyd en la boca. Contra el haitiano porque siempre arrastrará la mácula de haber ¿finalizado? su carrera contra lo menos peligroso e interesante de la oferta en una pala por lo adelantado del veredicto.
La victoria por nocao de André Berto contra Víctor Ortiz ayer en Carson, división welter, pudo tener un sabor cercano al dulce, pero no hubo faja en juego y en la que perdió cedió la diadema, así que, sensación agridulce y nada significativa para sus aspiraciones futuras, porque el perdedor es un pugilista al borde de la piltrafa del ring, que no puede responder como debe, luego de recibir un par de impactos, quien quiera mantenerse en tan duro oficio; Ortiz se marea rápido, no se recupera ni responde con eficiente claridad.
El pleito inició con relativa ventaja para el zurdo, cortado en la cabeza por un choque accidental, que provocó una hemorragia aparatosa que la esquina controló a medias.
Ortiz lanzó un par de buenos golpes que hicieron impacto y en el segundo una zurda larga tiró al haitiano por cuenta de protección, aunque sin mostrar signos de lastimadura preocupante.
Entonces saliero al 4to y el haitiano, subiendo la presión y levantando las acciones, logró meterle un uppercut entre una guardia demasiado baja y al garete como para evitarlo y tiró al americano, que se paró evidentemente noqueado, para recibir una andanada de golpes que le pusieron fin al combate por intervención del referí.
En pelea de la división lightheavy, Thomas Williams jr noqueó a Edwin Rodríguez faltando un segundo para concluir el segundo round, con gancho de zurda telegrafiado; prácticamente, el perdedor estuvo pidiendo el nocao al dejar muy baja la mano derecha y separando demasiado la zurda del radio que hubiera podido evitar el golpe que lo tiró. La pelea fue de constantes intercambios durante lo poco que duró.